¿Que los caballos no suelen distinguir a la gente?¿Eso de dónde te lo sacas? Claro que reconocen a las personas, a los perros y a todos los que están a su alrededor. Y si no que les pregunten a los G.Civiles que vinieron conmigo a recuperar mi caballo después de dos meses que me lo habían robado, que cuando ya pude acercarme a él vino corriendo y se quedó con el cuello posado sobre mis hombros, con su cabezota apretándome con fuerza mientras yo le abrazaba. ¡Las lágrimas se les saltaban a los que venían conmigo!