No os asustéis, no se trata de una decisión tan terrible como la de la protagonista de la novela de William Styron.
Me está pasando lo siguiente. Y me gustaría saber si vosotros habéis pasado o vivido algo similar.
A primeros de diciembre perdí a una de mis perras de un tumor cerebral de un día para otro (palleira adoptada de la perrera de Lugo, tenía 15 años, vivió conmigo 5 años).
Tengo otra perra, un cruce de chihuahua de 3 kg, con muy malas pulgas. También 15 años. Ella era la perra de los padres de un ex, que no había salido casi de casa en los 10 años que vivió con ellos hasta que me la cedieron. Y también lleva conmigo 5 años.
El caso es que yo adoraba a Rufa, la que ha muerto. Para mí era la perra perfecta: tranquila, cariñosa, sociable con personas y perr@s, obediente. Una típica perra faldera.
Oliva es simpática, un trasto, ladra a perros y personas, chafardera, maleducada, jetilla....muy del estilo de los chihuahua. El caso es que me he dado cuenta de que no la quiero como quería a Rufa.
La cuido, la alimento, le doy masajes. La adopté porque vi la vida tan triste que llevaba encerrada en aquel piso pero que su carácter no es "adorable". En pocas palabras, no la disfruto como disfrutaba a Rufa.
También me doy cuenta de que si hubiera tenido que elegir entre las dos, hubiera deseado que fuera Oliva la destinataria de tal mal destino. Hasta me da rabia que ella siga viva cuando la otra era mucho mejor perra.
A esta ahora mi única perra hace 3 meses la tuve que operar de urgencia de una piómetra. Me salió la broma por un pico (casi 900 euros con una subida de glucosa post operación). Ahora le han salido tumores en las mamas. Sé que si fuera Rufa, no dudaría en gastarme lo que fuera y salvarle la vida. Pero con Oliva me lo estoy pensando (independientemente de que los veterinarios tampoco me han aconsejado operarla debido a su edad,eh!).
Pues eso, tenía que contárselo a alguien. Me considero una buena persona para con los perros. Excepto el primero, que fue salvado de irse al hoyo como lo fueron sus recién paridos hermanos, el resto de mis perras han sido abuelitas enfermas adoptadas. Adoro a los perros pero no entiendo lo que me está pasando ahora.