Ahh, guay... entonces, si entro a tu casa, te pego una paliza y te dejo moribundo, me cargo a tus hijos y violo a tu mujer y me la llevo a mi casa, según tu perspectiva, no encarnaría crueldad, ¿no? En definitiva, es un comportamiento muy natural, muy recurrente en la antropología. Como la de hacer amistades y tratos políticos entre tribus usando a las mujeres como moneda, también. O practicar el canibalismo en casos de hambrunas, como hacían los homínidos, y más recientemente en la España de la posguerra.
Es ley de vida.