Bueno, voy a responderte en cuanto a mis experiencias. Sólo no olvides que las tuyas pueden ser bien diversas, pues todos somos únicos. Cuando os escribo algo, intento que sea lo más objetivo posible y no me refiero sólo a mis experiencias, sino también a los conocimientos que tengo y a varias experiencias de muchos amigos míos.
En cuanto a mí, empecé con los ayunos hace unos 7 años más o menos. Con agua, una vez por mes, la luna llena. Así unas 8 - 9 veces durante cuales me siempre sentí mal (pero era soportable) y con mucha hambre. A veces hasta vomitando la mañana siguiente (sólo pocas salivas, pues no había nada más).
Después un hombre de un grupo vegetariano argentino se puso en contacto conmigo pues se interesó por la comida cruda. Era un yogui de un grupo Ananda Marga y me habló también de su modo de comer y de ayunar diciendo, que él ayuna sin agua. Me inspiró y la siguiente vez quise intentar juntarme con él durante el ayuno y probarlo sin agua. Pensé que si sentiría mucha sed, lo cortaría y está, pero me sorprendió que no sentí ni sed ni hambre y en total me sentí muy bien. Entonces desde ese tiempo durante los aynos de 1 - 2 días prefiero ayunar sin agua, pues así me siento bien.
Primero siento siempre hambre y sed viene sólo después. No corto mis aynos siempre en el mismo modo. A veces tomo algo líquido como un zumo fresco o diluido con agua, o agua con unas gotas de limón y con azúcar crudo de caña. Agua sóla me daría asco pero así lo percibo como la comida, anque líquida. Otras veces como directamente algo sólido que me da ganas, pero intento de comerlo despacito, salivándolo bien, masticándolo bien.
Los líquidos son más recomendables que lo sólido pero yo no soy un tipo de persona que se preocupa por seguir las recomendaciones por 100%. Lo más importante para mí es actuar según como me siento, tanto en el plano de cuerpo como el de alma, los siento unidos.