Casi 600 euros me cuesta arreglar la bomba de dirección. Estoy harta de lo que cuesta mantener un coche, cuando no es una cosa es otra. Para empezar, ya nos quedamos sin poder irnos cuatro días en semana santa a causa de la bromita. Y ya el año pasado me dejé mil euros en el taller.
Tendría que haber estudiado mecánica en vez de filosofía, leñe.