La última fue muy hardcore, mientras estaba cocinando con unos amigos..
-Admiro tu fuerza de voluntad, yo no podría. Me gusta demasiado la carne.
-Pues oye querer es poder. No sé como no vomitas de meterte cosas muertas en la boca. (Aprovechando que ella mientras cortaba la carne).
-Uy, si yo es que me la como incluso cruda y coge un trozo de carne cruda chorreante de sangre que estaba cortando y se la zampa.
-Y que luego me digas que eres tan escrupulosa para otras cosas, tiene cojones..
Ni que decir que no lo volverá a hacer delante de mi, después de la charla que tuve con ella.