Hace un año, más o menos por estas fechas, di el gran paso y decidí convertirme en vegetariana. Dejé la carne y desde entonces no la he probado (si no se tienen en cuenta tres bocados que dí a la ternera que me puso mi madre en Navidad...entonces me dí cuenta de que no podría comer carne ni por compromiso). Seguro que, cuando lo dije a mi familia y a otras personas cercanas, en algún momento pensaron que era una excentricidad mía y que tarde o temprano volvería al redil. Pero no ha sido así. Al contrario, en los últimos meses dejé también el pescado y el marisco. Ahora de momento soy ovolacto, pero es muy posible que con el paso del tiempo, quizá con los años, llegue al veganismo. Hoy me he sentido orgullosa de mí misma y lo quería compartir con vosotros, sobre todo con los que acaban de dar el paso. Dentro de poco, sin que os déis cuenta, estaréis celebrando el primer aniversario. Angeline.