Día 5 (ayer): Ayer llegué al ecuador de mi cura y empecé una nueva fase... empecé a notar ya la paz y el relax mental, además del bienestar físico.
Noto como mis sentidos se han multiplicado: huelo más y más matices, noto infinitamente más cada caricia... y ha desaparecido gran parte de mi estrés y nerviosismo. Estoy genial!
Físicamente me siento con mucha vitalidad, y también animicamente muy positiva. Siento mucha energía vital, pero eso sí, también noto como tengo algo menos de fuerza física y me canso antes, eso es innegable. Pero nada grave.
El tema del aliento sigue sigue siendo lo más molesto, y aunque no tengo "hambre" propiamente dicha, cada vez siento más el deseo de comer y cocinar. Pero lo que decía, no por hambre sino por sentir la sensación de sabores, texturas... supongo que además lo siento más porque me encanta la cocina y comer y lo echo de menos.
Además ahora que mis sentidos están multiplicados seguro que notaría los matices de cada sabor, olor y textura mucho más... y lo más jodío es que del olor no me libro, porque los findes no estoy en casa y la gente come a mi alrededor...
un:
... y ayer la tentación se presentó en forma de una fuente de pimientos fritos y una barra de pan a mi lado que me repetían en forma de mantra: "Métenos dentro del pan y cómenos, métenos dentro del pan y cómenos..."
Ains, que pintaca tenían. Pero aguanté!
Si resisto todas las tentaciones del finde, el resto de días que me quedan entre semana están chupaos!