Cuando me chupaba la línea 5 completa (Hospitalet-Horta) no era consciente, porque como dices, no quedaba más remedio. Muchos años en Madrid y muchos en Barcelona. El último al que subí (2008), el de París, en hora punta, ensardinado de multiculturalidad, camino de Eurodisney. Un viaje muy entretenido.