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buscoamitribu
(Ante todo, ¡Esto es una presentación! Tengo el derecho, legítimo y natural, a presentar mi parte femenina!) Si tenéis algo de humor, aunque sea un poco, dejad que el mundo libere su expresión.
Busco padre para mi futuro hijo/a. Parte II
He decidido que ¡ya va siendo hora de ser madre! Como los hombres en este país son cada día más idiotas y por que no decirlo, asquerosos, mamarrachos, desmañados, catetos y cerriles, creo que lo mejor será ser madre soltera. Se me presenta ahora el dilema de la adopción o de buscar un semental a la altura, ardua y fatigosa tarea esta última.
En el caso de que me decantase por esta última opción; Interesados:
Quiero que mi hijo crezca sano y fuerte, me interesa más tu mente que tu cuerpo, pero una mente sana, es un cuerpo sano, así que habrás de ser deportista, sin vicios, no quiero esperma con nicotina, no quiero besos de humo, no quiero aliento a café ni a alcohol cuando jadees sobre mí. No te pido que seas vegano, porque eso ya es mucho pedir. En el caso de que tu cerebrito supere mis exigencias, habrás de ser paciente y entregado. Quiero que me adores, que me adules, quiero sentirme viva, quiero sentir tu deseo. No quiero que hagas gala de tus portentos. No me vas a sorprender, en todo caso, te sorprenderé yo, amante nimio y prepotente. Yo te regalaré en el cuello los besos y mordiscos que tu eres incapaz de darme. Yo gemiré en tu oído los gemidos que tu me niegas a darme. Amante soso y silencioso, que ingrato eres.
Las condiciones son simples: yo te daré todo el placer y la pasión que en mi sangre se contiene. Tú me tratarás con ternura, y a la vez salvajemente. Jugaré contigo y detendré tu placer hasta que yo crea necesario. Hasta que quede embarazada, te entregaré mi amor, saldré a tu encuentro, te cuidaré y soñaré con tus besos. Quiero que salgamos, que vayamos a sitios, que conozcas mi mundo y yo el tuyo, quiero sentirme viva. Cuando ya hayas puesto tu semillita, patán: podrás volver de nuevo a tu querida ciudad y quedarte todo el día en el sofá sentado, podrás bajar de casa y mostrar habilidad de tu portentosa movilidad por tu barrio, donde no te faltarán los kioskos con prensa deportiva, playeras de marca y concesionarios de coches con grandes escaparates, marcas caras, amigos nimios y simplones, apuestas, juego, droga, consumismo, modelitos extrafinas paseando su mal gusto, tu trabajo monótono y aburrido, tu piso sin balcones donde escasamente entra la luz del sol y tu cómoda hipoteca que impide que vivas. Para entonces, mi hijo/a ya sabrá amar a los animales, conocerá las flores y los nombres de las frutas y juntos pintaremos los colores de la vida, iremos a la playa a jugar con la arena y a bañarnos con las olas.
No te necesitamos, soez capullo.
