margaly
08-may-2008, 08:51
El abandono de una granja de Silleda provoca la muerte de 123 cerdas reproductoras por falta de alimento
Algunos de los animales llegaron a comerse unos a otros en su búsqueda desesperada de comida.
El abandono de una granja de Silleda por parte de su propietario provocó la muerte de 123 cerdas reproductoras, en su mayor parte por inanición. Los vecinos dieron la voz de alarma al percatarse del olor que desprendía la explotación, lo que motivó la actuación de agentes del Seprona de la Guardia Civil y de veterinarios del servicio de Sanidade Animal de la Consellería do Medio Rural.
Según fuentes de la consellería, una vez allí constataron que de las 130 cerdas reproductoras que había, solo siete de ellas estaban vivas. En el recinto se encontraban también vivos 150 animales de cebo, que tienen una mayor resistencia.
El propietario de la granja no dio de comer a los animales el viernes, sábado y el domingo de la semana pasada, lo que provocó la muerte de los cerdos a causa del hambre. Al parecer, algunos de los animales llegaron a comerse unos a otros en su búsqueda desesperada de comida.
Tanto los agentes del Seprona como los veterinarios achacaron el abandono de los animales a una situación del propietario, que se encontraba al parecer trastornado por una situación personal y familiar y cuyo estado anímico fue calificado de crítico.
Los servicios veterinarios asesoraron al dueño para que fuera él mismo el que solicitase una intervención. Esto facilitó la actuación y evitó un posible riesgo sanitario al actuar con premura. El caso fue llevado por el Seprona y Sanidade Animal de forma conjunta.
El pasado martes se procedió al vaciado de la nave. Los animales fueron destruidos y los que estaban vivos fueron trasladados al matadero de Chantada para ser sacrificados. Posteriormente se llevó a cabo la limpieza y desinfección total de las instalaciones, que quedaron listas para poder ser utilizadas en un futuro en cuanto existan garantías de que el ganadero pueda hacerse cargo de la explotación. Entre los cerdos son frecuentes los episodios de canibalismo y no es raro que en situaciones como esta de falta de alimento unos se muerdan a otros.
La granja se encuentra en la proximidades del casco urbano de Silleda, en una zona donde están ubicadas varias explotaciones.
En su informe, el Seprona y veterinarios tienen en cuenta las circunstancias del propietario que provocaron esta situación. No obstante, el abandono de animales, que en este caso además provocó la muerte de más de una centenar de ellos, está tipificado como una infracción muy grave.
http://www.lavozdegalicia.es/galicia/2008/05/01/0003_6780731.htm
Algunos de los animales llegaron a comerse unos a otros en su búsqueda desesperada de comida.
El abandono de una granja de Silleda por parte de su propietario provocó la muerte de 123 cerdas reproductoras, en su mayor parte por inanición. Los vecinos dieron la voz de alarma al percatarse del olor que desprendía la explotación, lo que motivó la actuación de agentes del Seprona de la Guardia Civil y de veterinarios del servicio de Sanidade Animal de la Consellería do Medio Rural.
Según fuentes de la consellería, una vez allí constataron que de las 130 cerdas reproductoras que había, solo siete de ellas estaban vivas. En el recinto se encontraban también vivos 150 animales de cebo, que tienen una mayor resistencia.
El propietario de la granja no dio de comer a los animales el viernes, sábado y el domingo de la semana pasada, lo que provocó la muerte de los cerdos a causa del hambre. Al parecer, algunos de los animales llegaron a comerse unos a otros en su búsqueda desesperada de comida.
Tanto los agentes del Seprona como los veterinarios achacaron el abandono de los animales a una situación del propietario, que se encontraba al parecer trastornado por una situación personal y familiar y cuyo estado anímico fue calificado de crítico.
Los servicios veterinarios asesoraron al dueño para que fuera él mismo el que solicitase una intervención. Esto facilitó la actuación y evitó un posible riesgo sanitario al actuar con premura. El caso fue llevado por el Seprona y Sanidade Animal de forma conjunta.
El pasado martes se procedió al vaciado de la nave. Los animales fueron destruidos y los que estaban vivos fueron trasladados al matadero de Chantada para ser sacrificados. Posteriormente se llevó a cabo la limpieza y desinfección total de las instalaciones, que quedaron listas para poder ser utilizadas en un futuro en cuanto existan garantías de que el ganadero pueda hacerse cargo de la explotación. Entre los cerdos son frecuentes los episodios de canibalismo y no es raro que en situaciones como esta de falta de alimento unos se muerdan a otros.
La granja se encuentra en la proximidades del casco urbano de Silleda, en una zona donde están ubicadas varias explotaciones.
En su informe, el Seprona y veterinarios tienen en cuenta las circunstancias del propietario que provocaron esta situación. No obstante, el abandono de animales, que en este caso además provocó la muerte de más de una centenar de ellos, está tipificado como una infracción muy grave.
http://www.lavozdegalicia.es/galicia/2008/05/01/0003_6780731.htm