dso
09-sep-2014, 08:58
La situación es la siguiente: fiestas en un pueblo, los amigos quedan para comer antes de salir por ahí. Me lío la manta a la cabeza y me apunto a la comida.
-¡Yo llevo mi comida, bastardos asquerosos! -les dije. Ya me conocen y saben que no tengo nada en contra de los hijos ilegítimos-. Y además llevaré empanada de sobra para que la probéis.
-No nos vas a convencer.
-¿Por qué iba a querer convencerte a ti de algo? Atontao.
-Idiota.
Así que me presento con una empanada de soja y fritada que quita el hipo, y llevo de más para que pruebe la chusma.
-Pues está rica.
-¿Seguro que no lleva carne? ¿Seguro?
-MMMmmm.
-Pero ¿Qué lleva? NO, en serio, no la quiero probar si no me dices lo que lleva?
Señor, dame paciencia, porque como me des fuerza...
Sentado en la mesa, no sé a qué Dios he ofendido, pero me toca al lado del Garrulo Mayor del Reino.
-Pero pruebal lechazo, hombreeeee, questá muy güeno!
-No, gracias, no como carne.
-¿Es que no te gusta estoooo?
-No, es que no como carne.
Pasa un minuto en el que procesa la información, mientras un reloj de arena da vueltas en su cabeza.
-Ah, pos eso es mu respetable también -farbulla un poco por lo bajini.
Mi yo interior saltó de la silla, cogió uno de los carteles taurinos de la sala (sí, era una peña taurina, por supuesto), lo enrolló con fuerza y se dedicó a empalar a unos cuantos de esos pimpollos como si fueran, efectivamente, trozos de carne en una brocheta.
Mi yo normalito se abrió otra cerveza y pasó de todo.
https://33.media.tumblr.com/tumblr_lj09qw4gNo1qc4debo1_500.png
Quizá no con una ensalada, pero con una empanada, la cosa cambia.
El resto del día me alimenté a base de un bocata preparado en mi casa con antelación y un par de raciones con patatas, que es lo único que se puede comer en las casetas de las ferias, y eso después de negociar duramente el que no lleven salsas mezcladas.
dso, haciendo la crónica de una borrachera de quince horas, que se dice pronto...
-¡Yo llevo mi comida, bastardos asquerosos! -les dije. Ya me conocen y saben que no tengo nada en contra de los hijos ilegítimos-. Y además llevaré empanada de sobra para que la probéis.
-No nos vas a convencer.
-¿Por qué iba a querer convencerte a ti de algo? Atontao.
-Idiota.
Así que me presento con una empanada de soja y fritada que quita el hipo, y llevo de más para que pruebe la chusma.
-Pues está rica.
-¿Seguro que no lleva carne? ¿Seguro?
-MMMmmm.
-Pero ¿Qué lleva? NO, en serio, no la quiero probar si no me dices lo que lleva?
Señor, dame paciencia, porque como me des fuerza...
Sentado en la mesa, no sé a qué Dios he ofendido, pero me toca al lado del Garrulo Mayor del Reino.
-Pero pruebal lechazo, hombreeeee, questá muy güeno!
-No, gracias, no como carne.
-¿Es que no te gusta estoooo?
-No, es que no como carne.
Pasa un minuto en el que procesa la información, mientras un reloj de arena da vueltas en su cabeza.
-Ah, pos eso es mu respetable también -farbulla un poco por lo bajini.
Mi yo interior saltó de la silla, cogió uno de los carteles taurinos de la sala (sí, era una peña taurina, por supuesto), lo enrolló con fuerza y se dedicó a empalar a unos cuantos de esos pimpollos como si fueran, efectivamente, trozos de carne en una brocheta.
Mi yo normalito se abrió otra cerveza y pasó de todo.
https://33.media.tumblr.com/tumblr_lj09qw4gNo1qc4debo1_500.png
Quizá no con una ensalada, pero con una empanada, la cosa cambia.
El resto del día me alimenté a base de un bocata preparado en mi casa con antelación y un par de raciones con patatas, que es lo único que se puede comer en las casetas de las ferias, y eso después de negociar duramente el que no lleven salsas mezcladas.
dso, haciendo la crónica de una borrachera de quince horas, que se dice pronto...