Ecomobisostrans
19-ene-2013, 16:21
http://www.avaaz.org/es/stop_frankenfish_r/?bxPnvbb&v=21157
Amigas y amigos,
Estados Unidos quiere convidar al mundo al primer pescado transgénico: un salmón mutante que podría diezmar las poblaciones de salmones salvajes y poner en peligro nuestra salud. Si no lo frenamos ahora, este pez "Frankenstein" podría ser tan solo el primero de una avalancha de animales modificados genéticamente inundando supermercados de todo el mundo. Haz clic abajo y sumemos un millón de voces para detener esta amenaza:
Estados Unidos está a punto de ofrecerle al mundo el primer animal comestible genéticamente modificado: un salmón mutante que podría acabar con poblaciones enteras de salmones salvajes y poner en riesgo nuestra salud. Pero podemos evitarlo antes de que este sospechoso pez Frankenstein llegue a nuestros platos.
Este nuevo tipo de pez falsificado crece dos veces más rápido que un salmón normal, y ni siquiera los científicos saben qué efectos a largo plazo podría tener sobre nuestra salud. A pesar de esto, ahora podría ser declarado un alimento seguro, ¡basándose en los estudios de la misma empresa que creó esta criatura transgénica! Afortunadamente, en EE.UU. es obligatorio por ley consultar al público antes de tomar una decisión. Una coalición de pescadores, ambientalistas y consumidores le está pidiendo al gobierno que cancele este espinoso acuerdo. Construyamos una ola gigante de apoyo global para ayudarles a ganar.
La consulta pública ya está abierta, y es nuestra mejor oportunidad para evitar que este salmón mutante se cuele en nuestros menús. Firma para detener el pez Frankenstein y comparte esto con todo el mundo. Cuando lleguemos a un millón de firmas, entregaremos esta petición al proceso formal de consulta
La compañía que desarrolló este pescado le alteró el ADN para crear un salmón que pudiera crecer a velocidades vertiginosas durante todo el año. No sólo desconocemos los efectos que a largo plazo tendrá este experimento sobre nuestra salud, sino que si algunos de estos peces o sus huevos alcanzasen un hábitat natural, podrían diezmar al resto de las poblaciones de salmón salvaje. Lo peor es que, si llega a los supermercados, no podremos diferenciar este salmón transgénico del real, y no será posible evitar su consumo.
La industria de la biotecnología ha gastado cientos de millones de dólares presionando para que los gobiernos aprueben sus productos modificados genéticamente. Este salmón transgénico podría ser el negocio de su vida, y abriría las compuertas de otras carnes alteradas hacia nuestros mercados. Pero el gobierno de EE.UU. considerará las opiniones del público antes de tomar una decisión final. Si los abrumamos con una oposición global gigante cuando menos se los esperan, podremos frenar esta peligrosa decisión .
El pez "Frankenstein" está a punto de ser aprobado. Alcemos la voz para asegurarnos que estas empresas no decidan qué es lo que comemos. Ayúdanos a reunir un millón de voces para frenar este pescado mutante:
Miembros de Avaaz ya nos hemos unido antes para proteger nuestros ecosistemas y nuestros alimentos de los experimentos peligrosos. En 2010, y con más de un millón de voces, nos manifestamos en contra de los alimentos transgénicos en Europa. Unámonos esta vez para detener al salmón Frankenstein.
Amigas y amigos,
Estados Unidos quiere convidar al mundo al primer pescado transgénico: un salmón mutante que podría diezmar las poblaciones de salmones salvajes y poner en peligro nuestra salud. Si no lo frenamos ahora, este pez "Frankenstein" podría ser tan solo el primero de una avalancha de animales modificados genéticamente inundando supermercados de todo el mundo. Haz clic abajo y sumemos un millón de voces para detener esta amenaza:
Estados Unidos está a punto de ofrecerle al mundo el primer animal comestible genéticamente modificado: un salmón mutante que podría acabar con poblaciones enteras de salmones salvajes y poner en riesgo nuestra salud. Pero podemos evitarlo antes de que este sospechoso pez Frankenstein llegue a nuestros platos.
Este nuevo tipo de pez falsificado crece dos veces más rápido que un salmón normal, y ni siquiera los científicos saben qué efectos a largo plazo podría tener sobre nuestra salud. A pesar de esto, ahora podría ser declarado un alimento seguro, ¡basándose en los estudios de la misma empresa que creó esta criatura transgénica! Afortunadamente, en EE.UU. es obligatorio por ley consultar al público antes de tomar una decisión. Una coalición de pescadores, ambientalistas y consumidores le está pidiendo al gobierno que cancele este espinoso acuerdo. Construyamos una ola gigante de apoyo global para ayudarles a ganar.
La consulta pública ya está abierta, y es nuestra mejor oportunidad para evitar que este salmón mutante se cuele en nuestros menús. Firma para detener el pez Frankenstein y comparte esto con todo el mundo. Cuando lleguemos a un millón de firmas, entregaremos esta petición al proceso formal de consulta
La compañía que desarrolló este pescado le alteró el ADN para crear un salmón que pudiera crecer a velocidades vertiginosas durante todo el año. No sólo desconocemos los efectos que a largo plazo tendrá este experimento sobre nuestra salud, sino que si algunos de estos peces o sus huevos alcanzasen un hábitat natural, podrían diezmar al resto de las poblaciones de salmón salvaje. Lo peor es que, si llega a los supermercados, no podremos diferenciar este salmón transgénico del real, y no será posible evitar su consumo.
La industria de la biotecnología ha gastado cientos de millones de dólares presionando para que los gobiernos aprueben sus productos modificados genéticamente. Este salmón transgénico podría ser el negocio de su vida, y abriría las compuertas de otras carnes alteradas hacia nuestros mercados. Pero el gobierno de EE.UU. considerará las opiniones del público antes de tomar una decisión final. Si los abrumamos con una oposición global gigante cuando menos se los esperan, podremos frenar esta peligrosa decisión .
El pez "Frankenstein" está a punto de ser aprobado. Alcemos la voz para asegurarnos que estas empresas no decidan qué es lo que comemos. Ayúdanos a reunir un millón de voces para frenar este pescado mutante:
Miembros de Avaaz ya nos hemos unido antes para proteger nuestros ecosistemas y nuestros alimentos de los experimentos peligrosos. En 2010, y con más de un millón de voces, nos manifestamos en contra de los alimentos transgénicos en Europa. Unámonos esta vez para detener al salmón Frankenstein.