Cotorra
23-may-2012, 15:16
Con la llegada de las altas temperaturas, encerrar a las mascotas en los vehículos supone un riesgo, aún con la ventanilla entreabierta y habiendo aparcado a la sombra
Los perros no disponen de un pulgar oponible al resto de falanges como los chimpancés, por ejemplo, tan parecidos a las personas. Pero no lo necesitan para tocar el claxón.
El can que ocupaba el interior del todoterreno que se observa en el vídeo no dudó en insistir con la bocina para alertar a su dueño de que ya llevaba demasiado tiempo solo en el auto.
El ruido estridente y continúo supone un daño minúsculo para el oído humano en comparación con el riesgo que entraña dejar a nuestras mascotas encerradas en un coche. Más en épocas de calor asfixiante. Y el verano está a la vuelta de la esquina.
Los veterinarios insisten cada año con motivo de la llegada del estío y de las temidas olas de calor que este afecta de manera muy directa e importante a los perros, ya que, al no sudar, solo pueden termoregularse respirando.
Aunque hayas estacionado a la sombra, el sol siempre acaba dándole por algún lado a tu vehículo, elevando la temperatura de su interior de manera irremediable. Por muy bajada que permanezca alguna de las ventanillas.
Golpe de calor
Que puedas soportar de forma estoica los 42º a la sombra y los asientos calentitos de tu auto no significa que el animal que te acompaña pueda sobrellevarlo igual de bien. Sobre todo aquellos perros obesos, con enfermedades cardiacas o de edad avanzada.
Los síntomas que te avisan de que tu mascota sufre un golpe de calor empiezan con un jadeo excesivo, mucosas muy rojas y agobio en general, como si no encontrara la postura adecuada. Aplícale agua (del grifo) de inmediato (manguera, ducha) o frótale con alcohol las almohadillas de las patas y la barriga para disminuir su temperatura corporal, que debe rondar los 38-39º.
Los perros pueden llegar a sufrir convulsiones y entrar en un estado comatoso debido al calor excesivo.
http://www.abc.es/20120523/natural-vivirenverde/abci-perros-solos-coche-201205231200.html
Los perros no disponen de un pulgar oponible al resto de falanges como los chimpancés, por ejemplo, tan parecidos a las personas. Pero no lo necesitan para tocar el claxón.
El can que ocupaba el interior del todoterreno que se observa en el vídeo no dudó en insistir con la bocina para alertar a su dueño de que ya llevaba demasiado tiempo solo en el auto.
El ruido estridente y continúo supone un daño minúsculo para el oído humano en comparación con el riesgo que entraña dejar a nuestras mascotas encerradas en un coche. Más en épocas de calor asfixiante. Y el verano está a la vuelta de la esquina.
Los veterinarios insisten cada año con motivo de la llegada del estío y de las temidas olas de calor que este afecta de manera muy directa e importante a los perros, ya que, al no sudar, solo pueden termoregularse respirando.
Aunque hayas estacionado a la sombra, el sol siempre acaba dándole por algún lado a tu vehículo, elevando la temperatura de su interior de manera irremediable. Por muy bajada que permanezca alguna de las ventanillas.
Golpe de calor
Que puedas soportar de forma estoica los 42º a la sombra y los asientos calentitos de tu auto no significa que el animal que te acompaña pueda sobrellevarlo igual de bien. Sobre todo aquellos perros obesos, con enfermedades cardiacas o de edad avanzada.
Los síntomas que te avisan de que tu mascota sufre un golpe de calor empiezan con un jadeo excesivo, mucosas muy rojas y agobio en general, como si no encontrara la postura adecuada. Aplícale agua (del grifo) de inmediato (manguera, ducha) o frótale con alcohol las almohadillas de las patas y la barriga para disminuir su temperatura corporal, que debe rondar los 38-39º.
Los perros pueden llegar a sufrir convulsiones y entrar en un estado comatoso debido al calor excesivo.
http://www.abc.es/20120523/natural-vivirenverde/abci-perros-solos-coche-201205231200.html