Ecomobisostrans
17-may-2012, 15:30
Los zoológicos no es lugar para niños ni para animales, dice el psiquiatra.
(Niños y zoológicos) En lugar de educar a los niños sobre la vida de los animales en estado salvaje, los parques zoológicos más a menudo enseñan a los niños a ver a los animales como una forma de entretenimiento, de acuerdo con el psiquiatra infantil Ramakrishna Sujatha. En este extracto de su próximo libro ¿Cómo no criar un asesino en serie: enseñarle al niño a sentir empatía por los animales , el Dr. Ramakrishna explica cómo incluso los parques zoológicos con carteles informativos y los mejores hábitats no pueden competir con el valor educativo de un espectáculo de la naturaleza en la televisión que películas de animales en su hábitat natural.
El Dr. Ramakrishna llegó a la conclusión de que todos los zoos son malos, incluso las "buena” personas, que llevan a sus hijos a un parque zoológico en realidad podría enseñarles otra cosas mejores y reales acerca de los animales.
En los últimos años, me he encontrado en medio de desacuerdos sobre algunos parques zoológicos. Soy psiquiatra infantil, y también me encantan los animales, así que mis preocupaciones son de dos tipos. Los animales en confinamiento amenudo exhiben un comportamiento psicótico antinatural e incluso, como resultado del aburrimiento y la inactividad. Este es un signo evidente de que están sufriendo. En cuanto a los niños, me he preguntado si un viaje al zoológico es una experiencia educativa, o si sólo se les anima a tratar a los animales con falta de respeto.
Mi familia fue mucho al zoológico cuando yo era un niño. Tengo recuerdos de la infancia de los gorilas enojados tras las rejas tirando cosas a los visitantes desprevenidos. Junto con muchos otros, tiré chucherías azucaradas a los osos polares, que ávidamente las pedían. No había carteles que prohibieran alimentar a los animales.
Obviamente, aquello que no eran buenas maneras para que un niño pequeño aprendiera sobre los animales, pero los zoológicos parecen haber cambiado en las últimas décadas. Ha habido una intención en recrear el medio ambiente natural, que nos proporciona una imagen más realista de donde viven los animales en su hábitat natural.
Además, los parques zoológicos deben ofrecer programas de salvaguarda para el comportamiento de sus animales, como un medio para prevenir el aburrimiento y el estrés emocional, con el fin de ser acreditado por la Asociación de Zoológicos y Acuarios, como tal.
Hasta hace poco, yo no había estado dentro de un zoológico en las últimas décadas, porque me pareció que eran demasiado deprimentes. Después de investigar sobre los nuevos requisitos, empecé a preguntarme si realmente las cosas han cambiado para mejor. La única manera de saber con certeza fue ir a ver por mí mismo.
Así que visité un zoológico tradicional, con animales salvajes de muchos continentes. Miré a los animales más pequeños en primer lugar, que parecía estar relativamente sanos y felices en sus exposiciones. Pero entonces me di cuenta de otros que no lo estaban haciendo bien.
Dos lobos se paseaban inquietos en un recinto que se había hecho para parecer muy hermoso para los ojos humanos, pero que aún así les daba muy poco espacio para vivir. Del mismo modo grandes felinos iban y venían en sus recintos, arriba y abajo de las colinas y la hierba, pero sin embargo en los patrones estereotipados indicativos eran de angustia emocional. La parte más triste fue ver las jirafas, cuyas piernas largas podían dar pocos pasos a través de su lugar de exposición. El zoológico de mascotas no están mejor. Un grupo de lechones en una pequeña jaula trataba desesperadamente de chupar mis dedos a través de la alambrada.
Si hubiera algo que los niños pudieran aprender de valor viendo a estos animales, ciertamente no lo vi. Lo que vi fue ver un montón de burla y la ignorancia en la gente que visitaba el zoo. Por ejemplo, varias familias se rió de una hembra de chimpancé, que estaba colgado de una cuerda con sus partes íntimas a la vista. Un padre vio el chimpancé y le dijo a su hijo: "Mira, un gorila!" Papá, no debe haber leído el cartel.
Había un cartel en el recinto de los simios que explicaba detalladamente sobre el hábitat, comportamiento y su conservación, sino que parte del edificio estaba completamente vacío. Todo el mundo parecía más interesado en señalar en la parte inferior del chimpancé y haciendo bromas.
Me pregunté si otros zoológicos podría ser diferente, visité un zoológico pequeño, y también el recinto de mamíferos marinos del acuario. Por desgracia, he observado problemas similares en cada uno de estos lugares.
A pesar de la esperanza de encontrar pruebas de lo contrario, debo concluir que los zoos siguen siendo perjudiciales para el bienestar animal, y que no enseñan a los niños lecciones positivas sobre los animales. Los niños que ven leopardos con patrones psíquicos enfermos tienen una idea completamente equivocada de lo que son los grandes depredadores. También aprenden que los animales deben sufrir para la diversión de los seres humanos y que esto es aceptable. Queremos enseñar a los niños a que muestren bondad hacia los animales, no que miren su miseria mientras comen palomitas de maíz.
Una experiencia más educativa se puede encontrar en parques naturales y santuarios, donde los animales son libres de vagar y hacer lo que quieran. Una alternativa aún mejor es ver vídeos de la naturaleza, y no me refiero a programas de vaqueros donde los hombres machistas y atormentar a hacen frente a bestias peligrosas para demostrar su propio valor. Me refiero a aquellos con los naturalistas reales que enseñan a los niños como los animales comen, duermen y viven en la ausencia de interferencia humana. Para que los jóvenes comprendan y aprecien a los animales salvajes, y sobre todo para que sepan que vale la pena salvarlos, tienen que aprender acerca de sus comportamientos naturales y la importancia de nuestro ecosistema. Los zoológicos modernos no enseñan ninguna de estas cosas.
Extraído, del libro, : Cómo no criar a un asesino en serie: enseñarle al niño a sentir empatía por los animales por Sujatha Ramakrishna, MD
Para obtener más información sobre el libro de próxima Dr. Ramakrishna, visite su sitio web en: http://www.teachingkidsempathy.com/store/
https://fbcdn-sphotos-a.akamaihd.net/hphotos-ak-ash3/562247_460130460669718_145302868819147_1975882_185 1024118_n.jpg
(Niños y zoológicos) En lugar de educar a los niños sobre la vida de los animales en estado salvaje, los parques zoológicos más a menudo enseñan a los niños a ver a los animales como una forma de entretenimiento, de acuerdo con el psiquiatra infantil Ramakrishna Sujatha. En este extracto de su próximo libro ¿Cómo no criar un asesino en serie: enseñarle al niño a sentir empatía por los animales , el Dr. Ramakrishna explica cómo incluso los parques zoológicos con carteles informativos y los mejores hábitats no pueden competir con el valor educativo de un espectáculo de la naturaleza en la televisión que películas de animales en su hábitat natural.
El Dr. Ramakrishna llegó a la conclusión de que todos los zoos son malos, incluso las "buena” personas, que llevan a sus hijos a un parque zoológico en realidad podría enseñarles otra cosas mejores y reales acerca de los animales.
En los últimos años, me he encontrado en medio de desacuerdos sobre algunos parques zoológicos. Soy psiquiatra infantil, y también me encantan los animales, así que mis preocupaciones son de dos tipos. Los animales en confinamiento amenudo exhiben un comportamiento psicótico antinatural e incluso, como resultado del aburrimiento y la inactividad. Este es un signo evidente de que están sufriendo. En cuanto a los niños, me he preguntado si un viaje al zoológico es una experiencia educativa, o si sólo se les anima a tratar a los animales con falta de respeto.
Mi familia fue mucho al zoológico cuando yo era un niño. Tengo recuerdos de la infancia de los gorilas enojados tras las rejas tirando cosas a los visitantes desprevenidos. Junto con muchos otros, tiré chucherías azucaradas a los osos polares, que ávidamente las pedían. No había carteles que prohibieran alimentar a los animales.
Obviamente, aquello que no eran buenas maneras para que un niño pequeño aprendiera sobre los animales, pero los zoológicos parecen haber cambiado en las últimas décadas. Ha habido una intención en recrear el medio ambiente natural, que nos proporciona una imagen más realista de donde viven los animales en su hábitat natural.
Además, los parques zoológicos deben ofrecer programas de salvaguarda para el comportamiento de sus animales, como un medio para prevenir el aburrimiento y el estrés emocional, con el fin de ser acreditado por la Asociación de Zoológicos y Acuarios, como tal.
Hasta hace poco, yo no había estado dentro de un zoológico en las últimas décadas, porque me pareció que eran demasiado deprimentes. Después de investigar sobre los nuevos requisitos, empecé a preguntarme si realmente las cosas han cambiado para mejor. La única manera de saber con certeza fue ir a ver por mí mismo.
Así que visité un zoológico tradicional, con animales salvajes de muchos continentes. Miré a los animales más pequeños en primer lugar, que parecía estar relativamente sanos y felices en sus exposiciones. Pero entonces me di cuenta de otros que no lo estaban haciendo bien.
Dos lobos se paseaban inquietos en un recinto que se había hecho para parecer muy hermoso para los ojos humanos, pero que aún así les daba muy poco espacio para vivir. Del mismo modo grandes felinos iban y venían en sus recintos, arriba y abajo de las colinas y la hierba, pero sin embargo en los patrones estereotipados indicativos eran de angustia emocional. La parte más triste fue ver las jirafas, cuyas piernas largas podían dar pocos pasos a través de su lugar de exposición. El zoológico de mascotas no están mejor. Un grupo de lechones en una pequeña jaula trataba desesperadamente de chupar mis dedos a través de la alambrada.
Si hubiera algo que los niños pudieran aprender de valor viendo a estos animales, ciertamente no lo vi. Lo que vi fue ver un montón de burla y la ignorancia en la gente que visitaba el zoo. Por ejemplo, varias familias se rió de una hembra de chimpancé, que estaba colgado de una cuerda con sus partes íntimas a la vista. Un padre vio el chimpancé y le dijo a su hijo: "Mira, un gorila!" Papá, no debe haber leído el cartel.
Había un cartel en el recinto de los simios que explicaba detalladamente sobre el hábitat, comportamiento y su conservación, sino que parte del edificio estaba completamente vacío. Todo el mundo parecía más interesado en señalar en la parte inferior del chimpancé y haciendo bromas.
Me pregunté si otros zoológicos podría ser diferente, visité un zoológico pequeño, y también el recinto de mamíferos marinos del acuario. Por desgracia, he observado problemas similares en cada uno de estos lugares.
A pesar de la esperanza de encontrar pruebas de lo contrario, debo concluir que los zoos siguen siendo perjudiciales para el bienestar animal, y que no enseñan a los niños lecciones positivas sobre los animales. Los niños que ven leopardos con patrones psíquicos enfermos tienen una idea completamente equivocada de lo que son los grandes depredadores. También aprenden que los animales deben sufrir para la diversión de los seres humanos y que esto es aceptable. Queremos enseñar a los niños a que muestren bondad hacia los animales, no que miren su miseria mientras comen palomitas de maíz.
Una experiencia más educativa se puede encontrar en parques naturales y santuarios, donde los animales son libres de vagar y hacer lo que quieran. Una alternativa aún mejor es ver vídeos de la naturaleza, y no me refiero a programas de vaqueros donde los hombres machistas y atormentar a hacen frente a bestias peligrosas para demostrar su propio valor. Me refiero a aquellos con los naturalistas reales que enseñan a los niños como los animales comen, duermen y viven en la ausencia de interferencia humana. Para que los jóvenes comprendan y aprecien a los animales salvajes, y sobre todo para que sepan que vale la pena salvarlos, tienen que aprender acerca de sus comportamientos naturales y la importancia de nuestro ecosistema. Los zoológicos modernos no enseñan ninguna de estas cosas.
Extraído, del libro, : Cómo no criar a un asesino en serie: enseñarle al niño a sentir empatía por los animales por Sujatha Ramakrishna, MD
Para obtener más información sobre el libro de próxima Dr. Ramakrishna, visite su sitio web en: http://www.teachingkidsempathy.com/store/
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