Umiko
11-dic-2011, 23:42
He visto las imágenes del acto de ayer de sol, y me he derrumbado. No entiendo como a la mayoría de la gente, se la trae sin cuidado que diariamente mueran millones de animales, o que les de igual incluso la manera en la que mueren o la vida que pueden llevar.
Estoy harta de gente que quiere comerse tranquilamente su cádaver y no toleran siquiera que lo llames por su nombre. O te dicen: "ESTO ES COMIDA Y NO CADÁVERES", indignados, o te exigen que les dejes comer tranquilo.
Incluso me frustra que lo consideren "una opción".
Que la gente pisotea de una manera tan sencilla y fácil los derechos humanos tan básicos, que luego hasta comprendes que si hacen eso con los humanos, ¿qué no harán con los que no son de su especie?, y llegar a ese punto, es una pena muy grande.
Que nadie me entienda, que viva rodeada de carnívoros que me consideran la rara y no me consienten decirles de donde viene el abrigo que usan, el perro de raza que se acaban de comprar, el filete que se meten en la boca o el circo y el zoo que visitan cuando no tienen nada que hacer.
Siendo la persona más pacífica del mundo, escuchando comentarios como "han nacido para eso", realmente me dan ganas de coger a ciertos humanos y estamparlos, eso es lo que se halla en mi interior hacia algunas personas, y me siento super sola, porque no tengo a nadie que me diga que lo hago está bien, que sé que está bien, pero aun así nunca nos viene mal que nos refuercen.
Y ahora vienen las navidades, y voy a tener que soportar ver el foie grass sobre la mesa, a mi sobrino restregándome los cadáveres por la cara en plan "esto te gusta eh?", o "mira qué bien huele", o a mi madre luciendo ese abrigo de visón que guarda como oro en paño ante ocasiones taaaan especiales como es la navidad. Y yo, probablemente, me siente a comer con ellos, demostrando estar en un día de felicidad para todos, con cara de buena niña que jamás ha roto un plato, y como no, también tengo que mostrar estar feliz y contenta de que ellos celebren la navidad por todo lo alto a costa de los demás. No puedo poner mala cara, no puedo decirles nada (no vaya a fastidiarles la cena), solo tengo que fingir, aguantar el trago, y mientras ellos, disfrutando como niños...
Siento mucho este rollo, pero es que tengo un día muy triste, y no sabía donde soltarlo.
Estoy harta de gente que quiere comerse tranquilamente su cádaver y no toleran siquiera que lo llames por su nombre. O te dicen: "ESTO ES COMIDA Y NO CADÁVERES", indignados, o te exigen que les dejes comer tranquilo.
Incluso me frustra que lo consideren "una opción".
Que la gente pisotea de una manera tan sencilla y fácil los derechos humanos tan básicos, que luego hasta comprendes que si hacen eso con los humanos, ¿qué no harán con los que no son de su especie?, y llegar a ese punto, es una pena muy grande.
Que nadie me entienda, que viva rodeada de carnívoros que me consideran la rara y no me consienten decirles de donde viene el abrigo que usan, el perro de raza que se acaban de comprar, el filete que se meten en la boca o el circo y el zoo que visitan cuando no tienen nada que hacer.
Siendo la persona más pacífica del mundo, escuchando comentarios como "han nacido para eso", realmente me dan ganas de coger a ciertos humanos y estamparlos, eso es lo que se halla en mi interior hacia algunas personas, y me siento super sola, porque no tengo a nadie que me diga que lo hago está bien, que sé que está bien, pero aun así nunca nos viene mal que nos refuercen.
Y ahora vienen las navidades, y voy a tener que soportar ver el foie grass sobre la mesa, a mi sobrino restregándome los cadáveres por la cara en plan "esto te gusta eh?", o "mira qué bien huele", o a mi madre luciendo ese abrigo de visón que guarda como oro en paño ante ocasiones taaaan especiales como es la navidad. Y yo, probablemente, me siente a comer con ellos, demostrando estar en un día de felicidad para todos, con cara de buena niña que jamás ha roto un plato, y como no, también tengo que mostrar estar feliz y contenta de que ellos celebren la navidad por todo lo alto a costa de los demás. No puedo poner mala cara, no puedo decirles nada (no vaya a fastidiarles la cena), solo tengo que fingir, aguantar el trago, y mientras ellos, disfrutando como niños...
Siento mucho este rollo, pero es que tengo un día muy triste, y no sabía donde soltarlo.