Tito Chinchan
28-abr-2011, 21:12
¿Donde meterlo? Platos principales: Legumbres.
¿Para quien? Pa' tí, pa' mí y pa' tós mis compañeros, y pa' mí primero.
Dificultad: Na, con una mano atada a la espalda y una Virginia haciendo la receta, fácil.
Ensucie de cocina: Esto lo hace Arguiñano, y los duendes se lo dejan niquel. Si no, con ir recogiendo aperos en el camino, no es mucho.
Precio: El arrte culinario no tiene precio.
Tiempo de preparación: Toda la puñetera mañana, así que hacerlo para gente que merezca el esfuerzo (como mi medi calabacín que aún menta la receta)
Potaje de Virginia a la cazuela de barro
Una cazuela de barro que soporte el fuego purificador
Una Virginia (opcional)
Una cebolla.
Dos zanahorias.
Cuatro setas.
Espinacas (frescas, por Dios santo, que estamos en Semana Santa y llora el niño cuando las ve congeladas).
Vaso de vino.
Vaso de agua.
Vaso de vino (cocinar da sed, y no todo será para los garbanzos)
Garbanzos (o los cocéis antes, o de bote, al gusto).
Una cucharadita de pimentón y otra de harina.
Tres o cuatro dientes de ajo pelados.
Dos patatas.
Laurel. Si son en rama, os podéis hacer una corona, enrollaros una sábana y pensad que sois el Cesar. Si lo hacéis, mandad fotos, por favor.
https://lh5.googleusercontent.com/_MDmBucYSkww/TbQJukMm_vI/AAAAAAAAbvQ/aQYykMQXTK0/s720/IMG_4226.JPG
El complemento Virginia me ha recordado a mi compañera de clase del mismo nombre. Un día me arrimé, en plena pre adolescencia, para tocarle el culo. Ella, que debía estar revenida de otras ocasiones, evitó mi mano y me persiguió por todo el patio hasta que me pilló. Manso recibí la mano de patadas que me pudo dar, que ahora que lo pienso, mucho castigo para poco delito, que fue más de pensamiento que de acto. Realizado este inciso, decidimos eliminar el complemento Virginia, que tienen muy mala leche ;-)
Cortamos la cebolla finita (el estandar que me gusta, vamos) y la sofreimos hasta el pochamiento junto a los ajos y el laurel en la cazuela de barro. Vamos añadiendo la zanahoria fileteada fina, las setas en trozos no muy grandes y finalmente las espinacas. Recordad que las espinacas es como los rellenos de paquete, prometen mucho, y luego se quedan en nada. Es decir, que echéis sin miedo. Pochamos todo esto a fuego lento, que tomen bien de sabor. Echamos la harina y el pimentón, y removemos para que empape el sabor, y que no se queme nada. Se puede añadir sal aquí, aunque no suelo echarle.
Incluimos los garbanzos y la patata cortada en dados. Removemos un poquito, y echamos vino y agua. Se tapa todo, se deja reducir el agua y listo para comer. Importante cocer la patata, que comérsela cruda será muy chic, pero ....
Besitos.
¿Para quien? Pa' tí, pa' mí y pa' tós mis compañeros, y pa' mí primero.
Dificultad: Na, con una mano atada a la espalda y una Virginia haciendo la receta, fácil.
Ensucie de cocina: Esto lo hace Arguiñano, y los duendes se lo dejan niquel. Si no, con ir recogiendo aperos en el camino, no es mucho.
Precio: El arrte culinario no tiene precio.
Tiempo de preparación: Toda la puñetera mañana, así que hacerlo para gente que merezca el esfuerzo (como mi medi calabacín que aún menta la receta)
Potaje de Virginia a la cazuela de barro
Una cazuela de barro que soporte el fuego purificador
Una Virginia (opcional)
Una cebolla.
Dos zanahorias.
Cuatro setas.
Espinacas (frescas, por Dios santo, que estamos en Semana Santa y llora el niño cuando las ve congeladas).
Vaso de vino.
Vaso de agua.
Vaso de vino (cocinar da sed, y no todo será para los garbanzos)
Garbanzos (o los cocéis antes, o de bote, al gusto).
Una cucharadita de pimentón y otra de harina.
Tres o cuatro dientes de ajo pelados.
Dos patatas.
Laurel. Si son en rama, os podéis hacer una corona, enrollaros una sábana y pensad que sois el Cesar. Si lo hacéis, mandad fotos, por favor.
https://lh5.googleusercontent.com/_MDmBucYSkww/TbQJukMm_vI/AAAAAAAAbvQ/aQYykMQXTK0/s720/IMG_4226.JPG
El complemento Virginia me ha recordado a mi compañera de clase del mismo nombre. Un día me arrimé, en plena pre adolescencia, para tocarle el culo. Ella, que debía estar revenida de otras ocasiones, evitó mi mano y me persiguió por todo el patio hasta que me pilló. Manso recibí la mano de patadas que me pudo dar, que ahora que lo pienso, mucho castigo para poco delito, que fue más de pensamiento que de acto. Realizado este inciso, decidimos eliminar el complemento Virginia, que tienen muy mala leche ;-)
Cortamos la cebolla finita (el estandar que me gusta, vamos) y la sofreimos hasta el pochamiento junto a los ajos y el laurel en la cazuela de barro. Vamos añadiendo la zanahoria fileteada fina, las setas en trozos no muy grandes y finalmente las espinacas. Recordad que las espinacas es como los rellenos de paquete, prometen mucho, y luego se quedan en nada. Es decir, que echéis sin miedo. Pochamos todo esto a fuego lento, que tomen bien de sabor. Echamos la harina y el pimentón, y removemos para que empape el sabor, y que no se queme nada. Se puede añadir sal aquí, aunque no suelo echarle.
Incluimos los garbanzos y la patata cortada en dados. Removemos un poquito, y echamos vino y agua. Se tapa todo, se deja reducir el agua y listo para comer. Importante cocer la patata, que comérsela cruda será muy chic, pero ....
Besitos.