Alex
20-abr-2010, 16:04
Desde hace ya unos años vengo recibiendo no menos de dos llamadas al día de: compañias telefónicas, bancos, establecimientos en los que he comprado alguna vez, etc.
Lo he intentado todo. Por las buenas, por las malas y las peores, a amenazarles, a llamando a consumo para informarme, a no coger el teléfono, a descolgar a determinadas horas (que hay que j _ d _ _se quedarse sin teléfono porque les salga a ellos de las narices) etc.
Cuando alguien llama con número oculto, o con los nuevos, que para el caso es lo mismo, siento como si alguien llamara a la puerta de mi casa con un verdugo en la cabeza y además se cabreara e insistiera hasta que le abres.
Da igual que estés en bater, en tus cosas, atendiendo a una persona mayor enferma o a un bebé, tienes que dejarlo todo porque EL CAPITAL TE LLAMA.
Lo único que me ha funcionado un poco para evitar ésto es cuando harto de que me llamaran al fijo los de Organge le dije que tomaran nota de mi teléfono movil para comprobar que pertenecía a esa compañía. Les indiqué que la próxima vez que me llamaran "para nada" al fijo, o al movil, me daría de baja en el movil. Resultó. Esa compañía ya no me llama. Qué curioso, con la de veces que se lo pedí por las buenas.
También me funcionó lo siguiente, cuando a casa me llegó una preciosa tarjeta de crédito que no había pedido y que para rechazarla tenía que llamar a un 902....... Pues con la carta debajo del brazo fui a la primera sucursal a pedir que me dejaran llamar desde alguno de sus teléfonos para rechazar una tarjeta que no había pedido. Asombrosamente me dejaron y la persona que me atendía al teléfono tenía que seguir su protocolo, de el cliente tiene que estar 10 minutos al teléfono, y terminé por decirle que a mi me daba igual tener el dinero en un banco que en otro. Diré que en medio de la conversación, ya subiendo el tono, la operadora me dijo que ella SÓLO hacía su trabajo. En medio del banco le grité que yo había tenido que dejar de hacer el mío y bajar al banco para una "mierda" que yo no les había pedido.
Pongo especial cuidado en a quién dejo mis datos pero las compañías que los tienen los venden. Estoy harto, aburrido, cansado y con infinitas ganas de que la sociedad se organice para rechazar este acoso diario.
Alex
Lo he intentado todo. Por las buenas, por las malas y las peores, a amenazarles, a llamando a consumo para informarme, a no coger el teléfono, a descolgar a determinadas horas (que hay que j _ d _ _se quedarse sin teléfono porque les salga a ellos de las narices) etc.
Cuando alguien llama con número oculto, o con los nuevos, que para el caso es lo mismo, siento como si alguien llamara a la puerta de mi casa con un verdugo en la cabeza y además se cabreara e insistiera hasta que le abres.
Da igual que estés en bater, en tus cosas, atendiendo a una persona mayor enferma o a un bebé, tienes que dejarlo todo porque EL CAPITAL TE LLAMA.
Lo único que me ha funcionado un poco para evitar ésto es cuando harto de que me llamaran al fijo los de Organge le dije que tomaran nota de mi teléfono movil para comprobar que pertenecía a esa compañía. Les indiqué que la próxima vez que me llamaran "para nada" al fijo, o al movil, me daría de baja en el movil. Resultó. Esa compañía ya no me llama. Qué curioso, con la de veces que se lo pedí por las buenas.
También me funcionó lo siguiente, cuando a casa me llegó una preciosa tarjeta de crédito que no había pedido y que para rechazarla tenía que llamar a un 902....... Pues con la carta debajo del brazo fui a la primera sucursal a pedir que me dejaran llamar desde alguno de sus teléfonos para rechazar una tarjeta que no había pedido. Asombrosamente me dejaron y la persona que me atendía al teléfono tenía que seguir su protocolo, de el cliente tiene que estar 10 minutos al teléfono, y terminé por decirle que a mi me daba igual tener el dinero en un banco que en otro. Diré que en medio de la conversación, ya subiendo el tono, la operadora me dijo que ella SÓLO hacía su trabajo. En medio del banco le grité que yo había tenido que dejar de hacer el mío y bajar al banco para una "mierda" que yo no les había pedido.
Pongo especial cuidado en a quién dejo mis datos pero las compañías que los tienen los venden. Estoy harto, aburrido, cansado y con infinitas ganas de que la sociedad se organice para rechazar este acoso diario.
Alex