Simoun
04-abr-2010, 18:39
http://aulastic.com/blogs/beatriz/files/2008/11/foss_5001.jpg
http://www.gorillafund.org/images/about/dian_fossey_digit_grave.jpg
En un día como hoy, hace 97 años, se establece, durante la segunda Conferencia de Mujeres Socialistas realizada en Dinamarca, que el 8 de Marzo sería recordado como el Día Internacional de la Mujer, en homenaje a las primeras féminas que lucharon contra la explotación capitalista: salarios miserables, jornadas extensas y, desde luego, las deplorables condiciones de sus lugares de trabajo.
En un comienzo este día fue, más bien, de carácter obrero, sin embargo, con el tiempo, pasó a convertirse en una jornada de lucha en la que las mujeres de todo el mundo reclamamos por nuestros derechos, los cuales, básicamente, consisten en la construcción de una sociedad justa que crea en el principio de igualdad de sexos, y de oportunidades, no tan sólo para las mujeres, sino PARA TODOS.
Y con motivo de todas las protestas, las huelgas y la sangre derramada por aquellas valientes mujeres, y dado también el hecho de que mis columnas tratan (o tratan de tratar) sólo sobre lo que concierne a animales y medio ambiente, me tomo la libertad de homenajear, modestamente, a una GRANDE, una conservacionista dedicada…
Dian Fossey fue una destacada zoóloga que se hizo conocida por su labor como conservacionista de los gorilas de montaña (en Virunga). Nació en San Francisco, Estados Unidos, el 16 de Enero de 1932.
En 1954 se gradúa de terapia ocupacional, para luego trabajar en un hospital de Kentucky con niños con fallas en el aprendizaje, y con los cuales aplicó sus métodos gestuales de comunicación – métodos que más tarde usó para lograr un entendimiento con los animales -.
En la década del 60, motivada por los estudios del zoólogo George Schaller, experto en gorilas, y más aún, por la horrorosa situación del momento: sólo quedaban 500 de esos animales en el mundo, emprendió su viaje a África. Allí observó de cerca a esta especie, y de pasada, conoció al famoso arqueólogo y paleoantropólogo Louis Leakey quien, además de saber mucho sobre el tema, y por ende, ayudarla en sus investigaciones, le ofreció trabajo. Es así como en 1967 se radica en África.
Los montes de Virunga quedan entre Zaire, Ruanda y Uganda - países altamente conflictivos -. El territorio está constituido por varios volcanes, muchos de cuales sobrepasan los 3.000 metros de altura, además una densa vegetación y humedad. Es en este lugar donde se sitúan los gorilas de montaña (los únicos que quedan en el planeta). Fossey ubicó su campamento en Karisoke, y desde ahí comenzó su carrera.
El mismo año en que se radica en África, funda Karisoke Research Center. Centro dedicado a la investigación y conservación de los gorilas de montaña, y que duraría hasta el año ’80.
La conservacionista utilizó métodos diferentes (que no es lo mismo que “diferentes métodos”, pues ella innovó en el campo de la zoología) de acercamiento hacia estos animales, logrando compenetrarse al punto en que fue aceptaba y tratada casi como igual en muchas de las familias de los gorilas de montaña. Ruidos, modos, costumbres similares, la convirtieron en una más del grupo. También por este motivo fue tratada, en reiteradas ocasiones, por sus semejantes, de extraña, (de “loca” a decir verdad) puesto que, según ella misma expresaba “prefiero estar y compartir con los animales antes que con las personas… la maldad humana me supera” sentenciaba.
Sus estudios permitieron descubrir que, al contrario del parecer colectivo, esta particular especie, no es violenta ni menos carnívora.
Fossey no sólo se dedicó a los estudios de esta fauna. También trabajó arduamente por erradicar la caza furtiva, la que acaba día a día con miles de animales. Según entendidos, de no haber sido por el trabajo y la dedicación que esta mujer entregó, los gorilas de montaña se habrían extinguido.
A pesar de no tener los conocimientos zoológicos necesarios, sus estudios se basaron en las investigaciones de George Schaller, entre otros especialistas. Aquello, sólo hasta 1974, tiempo donde vuelve a Estados Unidos y logra titularse en Zoología.
En 1980, se aleja de África, pues la situación en tal continente nunca ha sido de las mejores - fue muy perseguida por los “cazadores de gorilas” - y durante un tiempo trabajó como profesora en la Universidad de Cornwell. En 1983 escribe el libro titulado “Gorilas en la Niebla” en donde expone sus observaciones y su relación con estos animales.
Un dato no menor… un gorila llamado Digit - con el cual logró una excelente comunicación, al extremo que le permitía jugar con sus crías – fue víctima de una emboscada de cazadores furtivos, dándole muerte. El impacto en la naturalista fue tremendo, y desde luego, los días que le siguieron a este hecho se transformaron en una interminable guerra que, más tarde, culminaría de la peor forma.
Vuelve a África para seguir con su labor de conservacionista, y para esta vez luchar con mucha más fuerza y determinación por esta especie en peligro, sin embargo, su sueño pronto acabaría. Muere trágicamente, en Ruanda, el 26 de Diciembre de 1985. Ciertos personajes la asesinaron a machetazos. El crimen todavía no ha sido resuelto, pero se cree está relacionado con la persecución que ella emprendió con los cazadores furtivos (incluso gente de gobierno está metida en su muerte). Fue enterrada en el cementerio ubicado cerca de su vivienda y que construyó exclusivamente para los gorilas.
Sin lugar a dudas, Dian Fossey es digna de admiración entre todos los que amamos y respetamos la naturaleza, y por sobretodo, los animales. Su contribución a la zoología, acto evidentemente significativo e importante, no le llega ni a los talones en cuanto a lo que ella significa como persona.
Hay una película (1988) sobre Fossey que, más allá de no ser una gran película, sirve para conocerla un poco más. “Gorillas in the Mist” (Gorilas en la Niebla) dirigida por Michael Apted y protagonizada por Sigourney Weaver (más de alguna la habrá visto).
Su singular forma, esa mezcla de timidez y carácter, su tierno trato con su especie favorita, su dedicación EXTREMA, y esto con mayúscula, pues muy pocos en este mundo se atreverían a dejar de lado una vida tranquila y convencional y feliz, para sacrificarse por otros…
No existen suficientes palabras para expresar lo que se siente al saber que, dentro de este universo, muchas veces desgraciado, aún haya gente como Dian Fossey, dotada de esas increíbles ganas de HACER ALGO por los que sufren y carecen de una voz para defenderse.
Por eso, y por esta, su incansable lucha, y por supuesto, por sus gigantescos deseos de crear conciencia en los demás, Dian Fossey se ha convertido en un ser especial, de esos que ya casi no existen, una mujer, me atrevería a decir, ÚNICA.
“… cuando muera, no habrá nadie que salve a los gorilas, Karisoke será una atracción turística y dejará de existir como centro de investigación” (Dian Fossey).
Fuente: http://www.culturaenmovimiento.cl/mambo/index.php?option=com_content&task=view&id=187&Itemid=38
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P.D: Estoy totalmente de acuerdo en todo lo que ponen en el texto, me parece una mujer ÚNICA, MARAVILLOSA y que dio su vida por lo que quería defender, sin duda un modelo a seguir.
¿Qué opinais de ella? ¿Habeis leido su libro o visto la película basada en su vida, ambas del mismo nombre: "Gorilas en la niebla"?
http://www.gorillafund.org/images/about/dian_fossey_digit_grave.jpg
En un día como hoy, hace 97 años, se establece, durante la segunda Conferencia de Mujeres Socialistas realizada en Dinamarca, que el 8 de Marzo sería recordado como el Día Internacional de la Mujer, en homenaje a las primeras féminas que lucharon contra la explotación capitalista: salarios miserables, jornadas extensas y, desde luego, las deplorables condiciones de sus lugares de trabajo.
En un comienzo este día fue, más bien, de carácter obrero, sin embargo, con el tiempo, pasó a convertirse en una jornada de lucha en la que las mujeres de todo el mundo reclamamos por nuestros derechos, los cuales, básicamente, consisten en la construcción de una sociedad justa que crea en el principio de igualdad de sexos, y de oportunidades, no tan sólo para las mujeres, sino PARA TODOS.
Y con motivo de todas las protestas, las huelgas y la sangre derramada por aquellas valientes mujeres, y dado también el hecho de que mis columnas tratan (o tratan de tratar) sólo sobre lo que concierne a animales y medio ambiente, me tomo la libertad de homenajear, modestamente, a una GRANDE, una conservacionista dedicada…
Dian Fossey fue una destacada zoóloga que se hizo conocida por su labor como conservacionista de los gorilas de montaña (en Virunga). Nació en San Francisco, Estados Unidos, el 16 de Enero de 1932.
En 1954 se gradúa de terapia ocupacional, para luego trabajar en un hospital de Kentucky con niños con fallas en el aprendizaje, y con los cuales aplicó sus métodos gestuales de comunicación – métodos que más tarde usó para lograr un entendimiento con los animales -.
En la década del 60, motivada por los estudios del zoólogo George Schaller, experto en gorilas, y más aún, por la horrorosa situación del momento: sólo quedaban 500 de esos animales en el mundo, emprendió su viaje a África. Allí observó de cerca a esta especie, y de pasada, conoció al famoso arqueólogo y paleoantropólogo Louis Leakey quien, además de saber mucho sobre el tema, y por ende, ayudarla en sus investigaciones, le ofreció trabajo. Es así como en 1967 se radica en África.
Los montes de Virunga quedan entre Zaire, Ruanda y Uganda - países altamente conflictivos -. El territorio está constituido por varios volcanes, muchos de cuales sobrepasan los 3.000 metros de altura, además una densa vegetación y humedad. Es en este lugar donde se sitúan los gorilas de montaña (los únicos que quedan en el planeta). Fossey ubicó su campamento en Karisoke, y desde ahí comenzó su carrera.
El mismo año en que se radica en África, funda Karisoke Research Center. Centro dedicado a la investigación y conservación de los gorilas de montaña, y que duraría hasta el año ’80.
La conservacionista utilizó métodos diferentes (que no es lo mismo que “diferentes métodos”, pues ella innovó en el campo de la zoología) de acercamiento hacia estos animales, logrando compenetrarse al punto en que fue aceptaba y tratada casi como igual en muchas de las familias de los gorilas de montaña. Ruidos, modos, costumbres similares, la convirtieron en una más del grupo. También por este motivo fue tratada, en reiteradas ocasiones, por sus semejantes, de extraña, (de “loca” a decir verdad) puesto que, según ella misma expresaba “prefiero estar y compartir con los animales antes que con las personas… la maldad humana me supera” sentenciaba.
Sus estudios permitieron descubrir que, al contrario del parecer colectivo, esta particular especie, no es violenta ni menos carnívora.
Fossey no sólo se dedicó a los estudios de esta fauna. También trabajó arduamente por erradicar la caza furtiva, la que acaba día a día con miles de animales. Según entendidos, de no haber sido por el trabajo y la dedicación que esta mujer entregó, los gorilas de montaña se habrían extinguido.
A pesar de no tener los conocimientos zoológicos necesarios, sus estudios se basaron en las investigaciones de George Schaller, entre otros especialistas. Aquello, sólo hasta 1974, tiempo donde vuelve a Estados Unidos y logra titularse en Zoología.
En 1980, se aleja de África, pues la situación en tal continente nunca ha sido de las mejores - fue muy perseguida por los “cazadores de gorilas” - y durante un tiempo trabajó como profesora en la Universidad de Cornwell. En 1983 escribe el libro titulado “Gorilas en la Niebla” en donde expone sus observaciones y su relación con estos animales.
Un dato no menor… un gorila llamado Digit - con el cual logró una excelente comunicación, al extremo que le permitía jugar con sus crías – fue víctima de una emboscada de cazadores furtivos, dándole muerte. El impacto en la naturalista fue tremendo, y desde luego, los días que le siguieron a este hecho se transformaron en una interminable guerra que, más tarde, culminaría de la peor forma.
Vuelve a África para seguir con su labor de conservacionista, y para esta vez luchar con mucha más fuerza y determinación por esta especie en peligro, sin embargo, su sueño pronto acabaría. Muere trágicamente, en Ruanda, el 26 de Diciembre de 1985. Ciertos personajes la asesinaron a machetazos. El crimen todavía no ha sido resuelto, pero se cree está relacionado con la persecución que ella emprendió con los cazadores furtivos (incluso gente de gobierno está metida en su muerte). Fue enterrada en el cementerio ubicado cerca de su vivienda y que construyó exclusivamente para los gorilas.
Sin lugar a dudas, Dian Fossey es digna de admiración entre todos los que amamos y respetamos la naturaleza, y por sobretodo, los animales. Su contribución a la zoología, acto evidentemente significativo e importante, no le llega ni a los talones en cuanto a lo que ella significa como persona.
Hay una película (1988) sobre Fossey que, más allá de no ser una gran película, sirve para conocerla un poco más. “Gorillas in the Mist” (Gorilas en la Niebla) dirigida por Michael Apted y protagonizada por Sigourney Weaver (más de alguna la habrá visto).
Su singular forma, esa mezcla de timidez y carácter, su tierno trato con su especie favorita, su dedicación EXTREMA, y esto con mayúscula, pues muy pocos en este mundo se atreverían a dejar de lado una vida tranquila y convencional y feliz, para sacrificarse por otros…
No existen suficientes palabras para expresar lo que se siente al saber que, dentro de este universo, muchas veces desgraciado, aún haya gente como Dian Fossey, dotada de esas increíbles ganas de HACER ALGO por los que sufren y carecen de una voz para defenderse.
Por eso, y por esta, su incansable lucha, y por supuesto, por sus gigantescos deseos de crear conciencia en los demás, Dian Fossey se ha convertido en un ser especial, de esos que ya casi no existen, una mujer, me atrevería a decir, ÚNICA.
“… cuando muera, no habrá nadie que salve a los gorilas, Karisoke será una atracción turística y dejará de existir como centro de investigación” (Dian Fossey).
Fuente: http://www.culturaenmovimiento.cl/mambo/index.php?option=com_content&task=view&id=187&Itemid=38
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P.D: Estoy totalmente de acuerdo en todo lo que ponen en el texto, me parece una mujer ÚNICA, MARAVILLOSA y que dio su vida por lo que quería defender, sin duda un modelo a seguir.
¿Qué opinais de ella? ¿Habeis leido su libro o visto la película basada en su vida, ambas del mismo nombre: "Gorilas en la niebla"?