Mikael
03-abr-2010, 21:34
el otro dia fuí a pasear al monte... con una persona muy querida pero muy carnívora... en realidad la idea era animar a mi acompañante a curarse de un constipado que no acababa de superar tras doce dias de antibióticos... yo pensé que un poco de aire puro cargado de aromas vegetales... herborizar alguna planta facilona... y abrazarnos a algún árbol remolón... serían muy útiles... y lo fueron... pero este no es el asunto que ahora me interesa...
mi imaginación se dispara fácilmente con lo natural... y sin no la natural también... lo reconozco... y ya llevaba varios dias interesándome por el manido y repetido tema entre los metafísicos actuales, contactados intergalácticos, de la ascensión planetaria... parece ser que estamos a punto de sufrir o disfrutar (depende para cual según su grado de preparación) una transformación de toda la materia de nuestro planeta (algunos dicen que de todo el sistema solar o incluso de toda nuestra galaxia) hacia un grado superior de sutilidad... a un estado material más espiritual o de vibración o frecuencia más alta... que hará de este mundo algo mejor para los que sobrevivamos... pues pueden ocurrir varias catástrofes en el proceso...
sería algo parecido a lo que yo he defendido tanto sobre la posibilidad de la ascensión de nuestro cuerpo físico para el logro de la inmortalidad... pero a nivel planetario... asunto muy relacionado con la señalada fecha del 21-12-2010 para la mayoría...
el caso es que cuando dejé el asfalto de la ciudad y me dirigí al monte con el coche empecé a sentirme curiosamente ligero... algo que en principio no achaqué más que a la pureza del ambiente libre de contaminación... bajamos del coche y andamos por unos caminos de tierra entre campos labrados o ribazos del bosque más o menos afectados por la manipulación humana, en busca de algún espárrago... yo iba sintiendo algo especial en la luz, en el sonido de nuestras pisadas... algo que se intensificaba a medida que nos adentrábamos en la naturaleza... a medida que íbamos dejando atrás todo vestigio o resto de civilización, todo aquello que pudiera recordarnos que el ser humano hubiera pasado por allí alguna vez...
por fin decidimos caminar monte a través por donde habían unos senderos practicados por el paso de personas, pero no creados de forma artificiosa con alguna herramienta... sino solo del paso del tránsito de personas... allí la sensación se hizo evidente de forma clara y total... allí entendía lo que pasaba... sentia la tierra bajo mis pies como acorchada, ligera, crujiente, hueca... pegué una pequeña patada a una piedra y parecía un pedazo de corcho... o casi... ésa era la sención que me daba.. y mi imaginación... mi imaginación despegó....
imaginé que el mundo despertaba... que la tierra toda se hacía más ligera... la tierra y las plantas... todo lo que mantuviera el contacto puro y pleno con la tierra ascendia con ella a un plano más sutil... también la personas... algunas personas...
imaginé que las ciudades y su asfalto... y todos los animales y seres humanos que no habían logrado cierto nivel de pureza y autenticidad... no lograban conectar con la tierra y mantenían su grado actual de densidad...y no lograban ascender...
llegado a un punto de total ascensión todo lo denso sufría un hundimiento, no pudiendo lo ligero soportar la pesadez y gravedad de las ciudades y los seres densos que no hubieran podido lograr esa iluminación de su sustancia material... y recordé un comentario de la biblia en que se recomienda que al final de los tiempos todo aquel que esté en la ciudad o en su campo arando, deje su arado, sus campos y su casa y se fuera al monte... al monte... cuanto más tendremos que hacer los que estemos encerrado en un edificio de ocho plantas trabajando en medio de una ciudad de asfalto y cemento... huir al monte... ni siquiera servirá el jardín del barrio.... servirá el monte salvaje.... pues aunque tegamos el cuerpo ascendido y conectado a la tierra... deberemos huir a la naturaleza virgen para escapar de todas las catástrofes que se avecinan...
veis porque no me gusta leer novelas ni ver películas... ya no me las creo... y no las necesito... un paseito por el monte es mucho mejor... y más útil... cojimos un poco de tomillo... yo probé una planta que desconocía... de flor alargada azul oscuro... como con piquitos... llamativa... de sabor parecido al tomillo también... que me gustó mucho...la puse en mi boca y allí la dejé un buen rato...
las plantas pueden estar simpáticas o antipáticas, según su estado de madurez, que no tiene nada que ver con su edad o especie... sino que es una característica propia de su personalidad individual.... como pasa con nosotros según nuestro estado de ánimo... la tocas un poco, la sientes... si ella responde bien te da su virtud... intensifica su virtud... y se deja cojer... cede sus ojas con facilidad cuando tiras de ellas suavemente... sin forzar...
si éres capaz de salir al monte y sentir la simpatía de las plantas...y disfrutarlas... si eres capaz de dejar tranquilas a las plantas reticentes.... sin forzarlas... si eres capaz de sentir la diferencia.... es que estás conectado a la tierra y preparado a ascender con ella....
¡qué ganas tengo de salir al monte de nuevo!
salud y eterna juventud...
mi imaginación se dispara fácilmente con lo natural... y sin no la natural también... lo reconozco... y ya llevaba varios dias interesándome por el manido y repetido tema entre los metafísicos actuales, contactados intergalácticos, de la ascensión planetaria... parece ser que estamos a punto de sufrir o disfrutar (depende para cual según su grado de preparación) una transformación de toda la materia de nuestro planeta (algunos dicen que de todo el sistema solar o incluso de toda nuestra galaxia) hacia un grado superior de sutilidad... a un estado material más espiritual o de vibración o frecuencia más alta... que hará de este mundo algo mejor para los que sobrevivamos... pues pueden ocurrir varias catástrofes en el proceso...
sería algo parecido a lo que yo he defendido tanto sobre la posibilidad de la ascensión de nuestro cuerpo físico para el logro de la inmortalidad... pero a nivel planetario... asunto muy relacionado con la señalada fecha del 21-12-2010 para la mayoría...
el caso es que cuando dejé el asfalto de la ciudad y me dirigí al monte con el coche empecé a sentirme curiosamente ligero... algo que en principio no achaqué más que a la pureza del ambiente libre de contaminación... bajamos del coche y andamos por unos caminos de tierra entre campos labrados o ribazos del bosque más o menos afectados por la manipulación humana, en busca de algún espárrago... yo iba sintiendo algo especial en la luz, en el sonido de nuestras pisadas... algo que se intensificaba a medida que nos adentrábamos en la naturaleza... a medida que íbamos dejando atrás todo vestigio o resto de civilización, todo aquello que pudiera recordarnos que el ser humano hubiera pasado por allí alguna vez...
por fin decidimos caminar monte a través por donde habían unos senderos practicados por el paso de personas, pero no creados de forma artificiosa con alguna herramienta... sino solo del paso del tránsito de personas... allí la sensación se hizo evidente de forma clara y total... allí entendía lo que pasaba... sentia la tierra bajo mis pies como acorchada, ligera, crujiente, hueca... pegué una pequeña patada a una piedra y parecía un pedazo de corcho... o casi... ésa era la sención que me daba.. y mi imaginación... mi imaginación despegó....
imaginé que el mundo despertaba... que la tierra toda se hacía más ligera... la tierra y las plantas... todo lo que mantuviera el contacto puro y pleno con la tierra ascendia con ella a un plano más sutil... también la personas... algunas personas...
imaginé que las ciudades y su asfalto... y todos los animales y seres humanos que no habían logrado cierto nivel de pureza y autenticidad... no lograban conectar con la tierra y mantenían su grado actual de densidad...y no lograban ascender...
llegado a un punto de total ascensión todo lo denso sufría un hundimiento, no pudiendo lo ligero soportar la pesadez y gravedad de las ciudades y los seres densos que no hubieran podido lograr esa iluminación de su sustancia material... y recordé un comentario de la biblia en que se recomienda que al final de los tiempos todo aquel que esté en la ciudad o en su campo arando, deje su arado, sus campos y su casa y se fuera al monte... al monte... cuanto más tendremos que hacer los que estemos encerrado en un edificio de ocho plantas trabajando en medio de una ciudad de asfalto y cemento... huir al monte... ni siquiera servirá el jardín del barrio.... servirá el monte salvaje.... pues aunque tegamos el cuerpo ascendido y conectado a la tierra... deberemos huir a la naturaleza virgen para escapar de todas las catástrofes que se avecinan...
veis porque no me gusta leer novelas ni ver películas... ya no me las creo... y no las necesito... un paseito por el monte es mucho mejor... y más útil... cojimos un poco de tomillo... yo probé una planta que desconocía... de flor alargada azul oscuro... como con piquitos... llamativa... de sabor parecido al tomillo también... que me gustó mucho...la puse en mi boca y allí la dejé un buen rato...
las plantas pueden estar simpáticas o antipáticas, según su estado de madurez, que no tiene nada que ver con su edad o especie... sino que es una característica propia de su personalidad individual.... como pasa con nosotros según nuestro estado de ánimo... la tocas un poco, la sientes... si ella responde bien te da su virtud... intensifica su virtud... y se deja cojer... cede sus ojas con facilidad cuando tiras de ellas suavemente... sin forzar...
si éres capaz de salir al monte y sentir la simpatía de las plantas...y disfrutarlas... si eres capaz de dejar tranquilas a las plantas reticentes.... sin forzarlas... si eres capaz de sentir la diferencia.... es que estás conectado a la tierra y preparado a ascender con ella....
¡qué ganas tengo de salir al monte de nuevo!
salud y eterna juventud...