Loella
16-jul-2008, 20:44
Se calcula que en España hay aproximadamente seis millones de personas alérgicas, de las cuales entre el 15-30% lo son a los animales de compañía. Las alergias a los gatos son aproximadamente dos veces más comunes que las alergias a los perros.
Es el epitelio de la piel de nuestros animales el mayor causante de las alergias (alergeno), no el pelo, como se suele pensar, aunque éste lleva consigo parte de epitelio además de pólenes y polvo, que también actúan como alergenos.
El sistema inmune de una persona alérgica reacciona de forma exagerada ante estos alergenos, provocando mediante diversos mecanismos los signos típicos de la alergia, que varían desde rinitis, conjuntivitis, urticaria, lesiones cutáneas aisladas, hasta cuadros asmáticos severos. Se han descrito casos de shock anafiláctico en personas hipersensibles.
El diagnóstico de la alergia y la determinación de los alergenos siempre han de ser llevados a cabo por un alergólogo. Ante la sospecha de padecer problemas alérgicos debemos acudir al medico de cabecera que nos remitirá al especialista.
No debemos pensar que porque tengamos un perro o un gato en casa y desarrollemos síntomas de alergia, estos serán causados por el animal, debe ser el especialista el que, mediante pruebas especificas, determine el agente responsable de la alergia e instaure el tratamiento.
Tampoco debemos olvidar que el desarrollo de una alergia aparece cuando se alcanza un determinado umbral, podemos llevar mucho tiempo conviviendo con nuestros alergenos sin haber desarrollado hasta el momento ningún tipo de sintomatología.
Para los alergólogos, la primera recomendación para el manejo y tratamiento de una alergia a los animales de compañía es la eliminación del animal.
Durante el año 2007 se abandonaron en España doscientos mil perros y gatos, siendo la alergia de los propietarios una de las principales causas de este abandono[. No obstante, tres de cada cuatro pacientes alérgicos, se niegan a desprenderse de su mascota, ya que lo consideran un miembro más de la familia.
Deberán seguir las siguientes recomendaciones:
- Impedir al animal la entrada al dormitorio, manteniendo la puerta cerrada constantemente y limpiándolo con mucha frecuencia.
- Evitar las alfombras y el recargar las habitaciones con elementos decorativos.
- Usar mascarilla a la hora de pasar la aspiradora, y si es posible usar aspiradoras con filtro HEPA (alta eficiencia contra las partículas aéreas).
- Utilizar purificadores de aire con filtro HEPA en calefacción y aire acondicionado.
- Bañar al animal semanalmente y cepillarlo diariamente fuera de la casa. Estas acciones las deberá realizar otra persona. Si tiene pelo largo, mantenerlo recortado.
- En el caso de gatos machos, la esterilización ha demostrado que ayuda a reducir la producción de alergenos.
- Utilizar sobre el animal productos veterinarios que reducen el número de alergenos producidos por los mismos.
Con el cumplimiento de estas recomendaciones y de todas aquellas otras facilitadas por el médico, es posible que una persona alérgica pueda seguir conviviendo con su mascota sin grandes repercusiones para su salud.
Es el epitelio de la piel de nuestros animales el mayor causante de las alergias (alergeno), no el pelo, como se suele pensar, aunque éste lleva consigo parte de epitelio además de pólenes y polvo, que también actúan como alergenos.
El sistema inmune de una persona alérgica reacciona de forma exagerada ante estos alergenos, provocando mediante diversos mecanismos los signos típicos de la alergia, que varían desde rinitis, conjuntivitis, urticaria, lesiones cutáneas aisladas, hasta cuadros asmáticos severos. Se han descrito casos de shock anafiláctico en personas hipersensibles.
El diagnóstico de la alergia y la determinación de los alergenos siempre han de ser llevados a cabo por un alergólogo. Ante la sospecha de padecer problemas alérgicos debemos acudir al medico de cabecera que nos remitirá al especialista.
No debemos pensar que porque tengamos un perro o un gato en casa y desarrollemos síntomas de alergia, estos serán causados por el animal, debe ser el especialista el que, mediante pruebas especificas, determine el agente responsable de la alergia e instaure el tratamiento.
Tampoco debemos olvidar que el desarrollo de una alergia aparece cuando se alcanza un determinado umbral, podemos llevar mucho tiempo conviviendo con nuestros alergenos sin haber desarrollado hasta el momento ningún tipo de sintomatología.
Para los alergólogos, la primera recomendación para el manejo y tratamiento de una alergia a los animales de compañía es la eliminación del animal.
Durante el año 2007 se abandonaron en España doscientos mil perros y gatos, siendo la alergia de los propietarios una de las principales causas de este abandono[. No obstante, tres de cada cuatro pacientes alérgicos, se niegan a desprenderse de su mascota, ya que lo consideran un miembro más de la familia.
Deberán seguir las siguientes recomendaciones:
- Impedir al animal la entrada al dormitorio, manteniendo la puerta cerrada constantemente y limpiándolo con mucha frecuencia.
- Evitar las alfombras y el recargar las habitaciones con elementos decorativos.
- Usar mascarilla a la hora de pasar la aspiradora, y si es posible usar aspiradoras con filtro HEPA (alta eficiencia contra las partículas aéreas).
- Utilizar purificadores de aire con filtro HEPA en calefacción y aire acondicionado.
- Bañar al animal semanalmente y cepillarlo diariamente fuera de la casa. Estas acciones las deberá realizar otra persona. Si tiene pelo largo, mantenerlo recortado.
- En el caso de gatos machos, la esterilización ha demostrado que ayuda a reducir la producción de alergenos.
- Utilizar sobre el animal productos veterinarios que reducen el número de alergenos producidos por los mismos.
Con el cumplimiento de estas recomendaciones y de todas aquellas otras facilitadas por el médico, es posible que una persona alérgica pueda seguir conviviendo con su mascota sin grandes repercusiones para su salud.