El concepto general me parece muy bueno, lástima que se recurra a un argumento falaz cuando se afirma que el petróleo utilizado para hacer botellas de plástico equivale a no se cuantos automóviles funcionando no se cuantos kilómetros.
El plástico, junto con otros productos, se obtiene de la fracción del petróleo sobrante una vez refinados y extraídos todos los combustibles. O sea, consumamos o no plástico, se seguirá extrayendo exactamente la misma cantidad de petróleo al mismo ritmo, ya que esta depende, directa y primariamente, del empleo del mismo como fuente de energía.
Por lo demás, nada que objetar.