Si ves el video de Sandra que colgué más arriba puede que entiendas.
Porqué hay trata??, porque hay más demanda que oferta, y porque se mueven cantidades insultantes de dinero. Por supuesto hay involucradas personas poderosas, policías, políticos etc, dinero, dinero, lo demás no importa.
Y esto continuará así, aunque se regule, porque la única solución, tal cual lo expresa Sonia en el video, es que se deje de ir de putas.
Es escalofriante su testimonio.
Aquí , en este inform de Médicos del Mundo.
http://bbpp.observatorioviolencia.or...ectivaddhh.pdf
"LA PROSTITUCIÓN EN EL DERECHO COMPARADO: ESPECIAL CONSIDERACIÓN
A LA SITUACIÓN EN HOLANDA Y SUECIA.
En un reciente estudio la OIT afirma que “algunas personas entran al mercado de la
prostitución por decisión propia o por reafirmar su libertad sexual, otras lo hacen como
consecuencia de presiones económicas o por falta de alternativas y otras son obligadas a
hacerlo mediante engaño, violencia o el chantaje de una deuda.
En teoría, el derecho a prostituirse pertenece a la esfera de la autonomía del individuo y
existe en Europa una prostitución autónoma de mujeres; pero se trata de un fenómeno
marginal respecto a la cantidad de mujeres, sobre todo inmigradas, que son conducidas al
mercado del sexo por organizaciones que, en el mejor de los casos, las transforman en
“asalariadas” con muy pocos márgenes de decisión individual y, en el peor de los casos,
las reducen a una condición de total subordinación.
Desde hace tiempo, en los países de la Unión Europea coexisten los diferentes enfoques
de la prostitución, así como distintas interpretaciones y aplicaciones de las leyes. Pero
desde hace algunos años, la heterogeneidad de las políticas europeas en materia de
prostitución se ha convertido en un elemento de reflexión y debate, entre otras cosas, a
causa de la creciente presencia de prostitución extranjera, que ha potenciado la
prostitución callejera, un fenómeno minoritario en los periodos anteriores. Se verifican,
entonces, señales de polarización entre estados que adoptan un enfoque más cercano al
modelo abolicionista-prohibicionista (Suecia) y estados que prefieren la alternativa
reglamentaria (Alemania).
Los recientes procesos de integración europea en los sectores de justicia, asuntos
internos y protección de los derechos fundamentales, demuestran que la diversidad de las
políticas nacionales, en relación a la prostitución, constituyen un problema a afrontar en
los organismos de la UE. También en el debate intelectual y en el terreno científico se
observa una actitud de mayor atención y una acentuación de la contraposición entre
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quienes sostienen que la prostitución es un trabajo legítimo que hay que organizar y
proteger y los que consideran que esta actividad reduce los seres humanos,
especialmente las mujeres, a puros objetos de consumo y, en cuanto a tal, es inadmisible.
El debate sobre las normas a aplicar en relación a la prostitución ha de ocuparse también
de la expansión del fenómeno del tráfico. Las políticas adoptadas por los estados
europeos para eliminar, limitar o reglamentar la prostitución, no han sido capaces ni de
limitar la llegada masiva de mujeres extranjeras que ejercen la prostitución ni de afrontar
los problemas derivados de su entrada.
En este contexto de incertidumbre se plantean, por un lado, peticiones de organizar y
controlar la prostitución, proponiendo lugares y variantes alternativas de la actividad
como antídotos de la prostitución callejera y para un control sanitario más eficiente,
viendo en las inmigradas un riesgo para la salud de sus clientes. Por otro lado, va tomando
consistencia la idea de intervenir sobre la demanda y sancionar penalmente o con
sanciones administrativas a los clientes. Se trata pues, de enfoques muy diferentes entre
sí, de ahí la necesidad de intervenir con serios instrumentos de análisis y regulación.
Haciendo un breve recorrido por el tratamiento de la prostitución en los países de la
Unión Europea se pone de manifiesto lo señalado en los párrafos anteriores respecto a la
ausencia de un tratamiento unánime con respecto a la prostitución, encontrándonos
básicamente, con cinco modelos: el reglamentarista, entre los que se encuentran Holanda,
Alemania, Austria y Grecia; el neo-prohibicionista o abolicionista-prohibicionista, donde
sólo se encuentra Suecia; prohibicionista, donde se ubica Irlanda; el llamado nuevo
abolicionismo, como por ejemplo Francia, Italia, Bélgica y Luxemburgo y , finalmente, de
no intervención estatal, donde se encuadra a España y Portugal. Como conceptualmente e
ideológicamente ya se han definido en estas comparecencias, nos centraremos en
Holanda al ser el país con más tradición en la permisividad y reconocimiento del ejercicio
de la prostitución y en Suecia, ante un enfoque totalmente opuesto a los Países Bajos,
novedoso y elogiado por los expertos y, en concreto, por las feministas, cuyo análisis
merece recordar y abundar en este foro. "
Modelo Holandés
La política de aumento o de reducción de establecimientos crea dificultades para aquéllas
que quieran establecerse como independientes. La situación actual hace pensar que no
son las prostitutas independientes (y su eventual asociación en cooperativa/colectivo)
quienes se benefician de este cambio en la ley. En relación a la protección legal del trabajo
y, en vista de la ausencia de una legislación nacional, es la relación prostituta-gerente, la
que determinará la calidad de los derechos laborales. En vista de la situación fragmentada
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y débil de las prostitutas (variedad de formas de ejercer la prostitución, variedad de
origen étnico, peso del estigma que impide la reivindicación colectiva) su capacidad de
negociar buenas condiciones será muy limitada y los gerentes pueden fijar de manera casi
unilateral las condiciones, el ambiente y las relaciones de trabajo. Actualmente, nada
parece estar hecho para reforzar la posición de la independencia de las prostitutas.
Además, el Estado no otorga más medios a la policía y a la justicia para controlar la
aplicación de las nuevas leyes, por lo cual, el Estado de no derechos, continuaría
existiendo. La situación de mujeres no provenientes de la Unión Europea se empeora
como consecuencia de esta ley, pues ellas se ven empujadas hacia las formas de
prostitución más bajas o no reguladas, allá donde la zona del no derecho continúa
persistiendo. Esta ley pretendía dar una respuesta a la migración de mujeres sin contribuir
con una solución real: marginalización y exclusión serán los resultados. La despenalización
de la prostitución no basta para mejorar la posición de las mujeres y darles acceso a más
derechos y a la palabra. El Estado aumenta sus medios de control del ejercicio de la
prostitución, los gerentes –y no las prostitutas- van a beneficiarse de los cambios. Esto no
es una política de emancipación hacia las prostitutas. "
Modelo sueco:
"La ley sueca penaliza económicamente o con prisión al cliente de la prostitución. Se
afirma que esta nueva ley consiguió la reducción del 70% de la prostitución callejera y el
50% de la prostitución en clubs en un año. Actualmente, el porcentaje de reducción de la
prostitución de calle se eleva al 90%, la cantidad de mujeres prostituidas se ha reducido
en más de dos tercios y la de clientes en un 80%. Ningún otro país y ningún otro
tratamiento al respecto se acercan a los prometedores resultados observados en Suecia.
En el simposio sobre prostitución que se celebró en Madrid a partir del 26 de junio de
2000, Suecia estaba en el punto de mira de todos los participantes. La pionera legislación
sueca recibió los elogios de expertos en el congreso. Sus ventajas: no criminalizar a las
mujeres y prohibir la compra de servicios sexuales. En su primer año de aplicación, once
clientes fueron condenados y otros cuarenta y dos están siendo investigados, según
explicó la parlamentaria sueca Elisabeth Markstrum. La ley, en un año, ya había
conseguido reducir el ejercicio de la prostitución callejera un 35 por ciento. La diputada
afirmó que el reto es conseguir, además, que sea efectiva también respecto a la que no se
exhibe en la calle. “No queremos una legislación permisiva –aseguró Markstrum- porque la
prostitución es una cuestión de poder y no vamos a permitir a los hombres comprar a las
mujeres”.
Suecia lleva ventaja al resto de países europeos en el tratamiento legal de la prostitución.
Pero la actuación contra la prostitución en Suecia también incluye medidas preventivas no
menos eficaces. Según explicó la parlamentaria Markstrum, “a los hombres que buscan sexo,
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la mayor parte casados y con hijos, los policías les informan de que la prostitución se considera
una actividad criminal. Esta actuación policial ha resultado exitosa porque a los clientes no les
interesa que trascienda”. Continúa señalando “no nos gusta enviar a los hombres a la cárcel y
no lo consideramos un éxito. El éxito se conseguirá cuando se produzca un cambio de actitud en
los ciudadanos y se considere la prostitución una explotación del hombre contra la mujer”.
Tengo que leerme más detenidamente este informe, tiene 43 páginas y ahora no me da tiempo.