Eso es lo más importante, ir gradualmente pero no limitarse, y si te apetece un día o los que consideres tomar algo diferente, adelante, además es quizás el solo hecho de pensar en esa comida la que te puede generar contrariedades o ansiedad por tomarla, entonces lo mejor es, sin culpa ninguna y con total libertad siempre, probarla. El cuerpo se irá habituando y comparando las posibilidades que le brindas y poco a poco se irá decantando por la que mejor le sienta, los síntomas serán evidentes según lo que tomes
A mi me pierde el chocolate negro por ejemplo, alguna vez me permito tomarlo por gusto, pero el cuerpo ya no me pide cosas procesadas complejas, ni guisos, sólo lo simple.
Voy a poner lo de hoy:
-Desayuno: Chirimoyas y plátanos
-MM:
Batido verde de canónigos, rúcula, apio, cilantro
kiwis y manzanas
-Comida: Ensalada de germinados de quinoa con rabanitos, zanahoria, zumo de limón, hojas de albahaca fresca y endivias
-MM: Leche de avellanas remojadas casera
-Cena: Calabacín con tomate y orégano