Cuando un vegetariano da sus razones para no comer animales, suele hablar de empatía, que, matices aparte, es compasión. Ponerse en el lugar del otro, vaya, imaginarse que lo que le hacen a él me lo hacen a mí, sufrir, aunque sea de forma imaginada, lo que sabemos o creemos que otro sufre. la misma respuesta cuando se le pregunta a alguien que colabore de la forma que sea en la ayuda a animales. Y la misma cuando colabora en ayuda a humanos. Pero personalmente, cuando me encuentro con que un animal lo está pasando mal, no me pongo en su piel, sino que me invade una especie de instinto maternal, un deseo de protección y de cuidado. Es incluso físico, el instinto es ir a cogerlo, a abrazarlo, cosas así. Exactamente igual con un niño. Con un humano adulto, es compasión, pero en el peor sentido de la palabra, es lástima. Y por cierto, a propósito del hilo en el que estáis hablando sobre empatía hacia animales y hacia humanos, es una lástima difícil de sentir, reservada sólo a quienes lo están pasando muy muy pero que muy mal. Si se da el rarísimo caso en el que al humano adulto que lo pasa mal pueda verlo como un ser inocente, como a un animal o a un niño pequeño, entonces volvemos al instinto de protección. Pero para no extenderme más: abro el post porque tengo curiosidad por saber si otras personas que han decidido no comer animales lo han hecho movidos por sentimientos de este tipo y más alejados de la empatía. Obviamente al no comer carne no hay un sentimiento de protección hacia el animal del que es lo que hay en el plato, la decisión viene de evitar la contradicción entre querer protegerlos y participar en su tortura, sería un acto de "protección indirecta". Pero en cualquier caso, la decisión siempre tiene que ser consecuencia de un momento en el que se dice "no quiero que se les torture y por lo tanto voy a no participar en ello para arreglar la parte que está en mi mano". El asunto es de dónde viene en cada caso ese "no quiero que".