Muchas veces, seguimos arrastrando de adultos, sensaciones vividas en nuestra infancia que quedaron enquistadas, como marcadas a fuego, sensaciones de habernos sentido muy desvalidos, debido a determinadas circunstancias que hacen a nuestra historia personal, esto es muy común en la vida de cualquier ser humano. Esas experiencias pueden haber quedado fijadas y arrastradas a lo largo de la vida, perdurando esa sensación de incapacidad, de desvalorización, de “no poder”, de “no llegar a”…. La anemia es una incapacidad de la sangre de poder
tener la suficiente potencia para encarar las funciones vitales normalmente, esto puede traducirse como nuestra incapacidad mental en generar aquello que se anhela. La lucha entre lo que uno es y quisiera ser quita energía, entre lo que sucede y lo que anhelamos suceda, desvitaliza y baja las defensas del organismo. f) Vida sedentaria La anemia es una disfunción de la sangre, la cual necesita para nutrirse del oxígeno y también de la expulsión del anhídrido carbónico. Esto solo es posible a partir de una buena respiración, generando la alcalinidad de la sangre que se genera, entre otras cosas, a partir del movimiento. La gente de hoy pasa del automóvil a la silla que está frente a la computadora. El cuerpo permanece inmóvil durante la mayor parte del día, no hay tono muscular, que implica vitalidad, no hay flexibilidad, que implica mover la sangre, generar una buena actividad circulatoria, que los nutrientes se muevan por todo el cuerpo, para permitir la entrada de estos a través de las paredes celulares y permitir la salida de las toxinas por las mismas. Visión de la medicina tradicional La medicina tradicional, tiene la actitud de generar temor en relación a la anemia, como si fuera un fantasma al que solo se lo puede combatir a partir de medicación y muy fuerte, como la incorporación de hierro, ácido fólico o Vitamina B12 en forma intravenosa o ingestión de cápsulas. Por supuesto que existen situaciones difíciles que no pueden controlarse, por lo que se hace necesario la medicación, pero en la mayoría de los casos ésta puede suplantarse por un cambio de hábitos y de actitud ante la vida, una alimentación equilibrada, aportando alimentos que nutran las falencias y una actividad física constante y diaria. Es muy común hoy escuchar el caso de personas jóvenes que trabajan mucho y que llegan a las 5 ó 6 de la tarde sin energía, sumamente cansadas. Van al médico y este les hace hacer un chequeo, en éste los índices marcan que los glóbulos rojos están bajos, según la medición 3.900.000 millones de glóbulos rojos, cuando para la medicina lo normal son 4.500.000. En el intento de subirlos se les receta hierro y una serie más de vitaminas y minerales. El consumo de hierro en determinadas dosis, como son la de las cápsulas e inyecciones suelen desequilibrar la función digestiva y alterar el funcionamiento del hígado, ya que éste se desequilibra con el exceso de minerales. La persona se siente mal y muchas veces se le dispara la presión sanguínea por este mismo tema de ingestión de hierro, por lo cual acude nuevamente al médico y éste le da un antihipertensivo, que la deprime, con lo cual le termina dando un Prozac (droga antidepresiva). Es decir de una baja de glóbulos rojos, la persona termina con un antidepresivo. Esto significa un desconocimiento de la naturaleza humana y una parcialización, ya que por un lado en ningún momento se trató de comprender cuál es la causa de su cansancio y falta de energía. En general la mayoría de la gente se levanta muy temprano, come 2 galletitas con algún café o hierba mate, sale apurado a su trabajo, se sienta frente a una computadora, vuelve a tomar otros cafés, con alguna medialuna u otra galleta, al mediodía en el mejor de los casos, una tarta calentada en el microondas, que no tiene ninguna vitalidad, un jugo de naranja como lo más alimenticio, vuelve a la oficina y otro café y obviamente llega a las 5 de la tarde sin fuerzas, es lógico que así suceda, sus capacidades naturales están sobrepasadas, además de recibir el día entero la contaminación que existe en los edificios inteligentes, donde no se respira aire puro, alfombras de plástico, paredes con formaldehídos, luces dicroicas, computadoras. Tampoco el médico se interesó en su forma de comer, de vivir, de relacionarse afectivamente, de su vida sexual, solo mandó a hacer los análisis y medicó. Por otro lado las cifras son muy relativas, hay personas que con 3.800.000 de glóbulos rojos funcionan perfectamente y querer llevar el índice a 4.000.000 o a 4.500.000 resulta traumático, ya que el exceso de minerales y además la ingesta de éstos en forma de suplementos pueden afectar la función hepática y otras funciones del
organismo. Formas de resolución La anemia puede resolverse, primero que nada conociendo la causa que la provoca y viendo la manera de utilizar formas naturales, sin violentar el organismo. También en el caso de anemias por pérdida de sangre durante la menstruación, en la que ésta es muy abundante, es necesario comprender la causa de esa abundancia, ¿¿¿porqué tanto??? En general esto tiene que ver con una sobrecarga muy grande durante el período anterior a la menstruación. Las chicas de hoy y mujeres de hoy son hiperactivas, con un nivel de exigencia muy alto y con una necesidad de hacer, hacer, hacer. Se sobrecarga por lo tanto, tensiones, angustias, presiones propias y ajenas, exceso de todo tipo, de responsabilidad, que termina siendo irresponsabilidad hacia uno mismo, todo esto la única forma que tiene de descargarse es a través de la menstruación. En esos días, existe la posibilidad de sacar afuera todo lo acumulado y eso sale por esa vía que es una de las maneras de exteriorización que el cuerpo tiene para sacar los excesos acumulados. Entonces para que las pérdidas de sangre no sean tan excesivas habría que entender más que: "¿Cómo las evito y con qué?”,” ¿Porqué me sobrecargo tanto?”. Tanto hombres como mujeres, sobrecargamos y tensionamos nuestra zona pélvica, donde se encuentra el centro de las sensaciones. Vivimos tan en el plano del pensar, del debo, tengo, hay que…, que tanta actividad mental ha ido en detrimento de nuestras funciones vitales, entre ellas la capacidad de sentir, la sensualidad. Vivimos una sociedad de seres muy pensantes que les cuesta relajarse y entregarse a los acontecimientos de la vida naturalmente. Tanto pensamiento mecánico ha ido en desmedro de lo sensual, lo sexual, lo amoroso, sensitivo y perceptivo. Este exceso de pensamiento tensiona y bloquea energéticamente la zona baja del cuerpo, sobrecargándola. También suelen existir anemias debido a problemas gástricos por úlceras sangrantes y también hemorroides sangrantes, lo
mismo ocurre en estados post-operatorios. En todos estos casos se pueden modificar teniendo en cuenta las pautas siguientes. Alimentación En lo que respecta a la absorción de nutrientes, éstos han de estar presentes no tanto por lo que se agrega a la ingesta diaria, sino más bien por lo que se le quita. El hecho de que la anemia sea una enfermedad que incluso aqueja a personas sobrealimentadas, tiene que ver entre otras cosas , como ya hemos visto, con el hecho que los minerales y nutrientes en general no son absorbidos o son “lavados” debido a la existencia de una sangre de mala calidad que impide la fijación de dichos nutrientes. En lo que respecta concretamente al alimento, el exceso de grasas saturadas, el exceso de azúcar refinada y alimentos refinados en general, el exceso de harinas, incluso aunque sean integrales, la comida fast-food, la comida demasiado condimentada, el alcohol y los químicos en general, impiden que los minerales y Vitaminas del cuerpo queden fijados y sucede como en una tierra lavada por tanta agua y falta de abono, que al no tener minerales no es apta para labrarla. Es sabido que, entre otras cosas, por ejemplo la falta de ácido fólico se debe al consumo de alcohol, la de Vitamina B12 al consumo de químicos en general, la de hierro al exceso de cafeína, presente tanto en el té negro, como en la hierba mate y por supuesto en el café y también a la ingesta de azúcares y carbohidratos en general. Tenemos una actitud muy intervencionista frente a las enfermedades que nos aquejan, por eso es importante insistir más en lo que se deja que en lo que se agrega, ya que el organismo tiene una inteligencia natural para volver a su estado de equilibrio, cuando encuentra el orden adecuado. La anemia ha de resolverse en lo que al alimento se refiere dejando el exceso de grasas animales, azúcares, productos químicos en general, exceso de harinas, exceso de sal. También teniendo más
conciencia en la incorporación de alimentos que contengan hierro, vitamina C (para fijar el hierro), ácido fólico, vitamina B12. Las fuentes Las fuentes más importantes de la vitamina B12 o cobalamina son: germen de trigo, semilla de girasol, tempeh y miso (derivados de la soja), brotes de legumbres (sobre todo al 4to día de germinación), algas: espirulina (la más rica), nori, fucus, kombu y wakame en ese orden, levadura de cerveza, perejil, avena. Se sintetiza también en el colon a través de la flora. Para la producción de glóbulos rojos necesita actuar en presencia de la B9 ó ácido fólico. Las fuentes más importantes de ácido fólico son: trigo burgol, poroto de soja, germen de trigo, espárragos, hojas de nabo, garbanzos, semillas de girasol, naranjas, brócoli, remolacha, frambuesas, paltas, coles de Bruselas.