Hace un par de años que rondaba mi cabecita cambiar mi alimentación. En mi casa se comió carne siempre, de hecho nosotros criábamos animales para consumo propio, algo que siempre me produjo un gran cargo de conciencia y sentimientos encontrados. Es cierto que en las aldeas se es más respetuoso con los animales cuando se crian para este fin de lo que ocurre en las granjas. Aún así, siempre noté que algo de aquello no iba conmigo. En mi entorno nadie es vegetariano o vegano y la verdad, cuando saco el tema, todos están convencidos de que esa alimentación no es adecuada porque es deficiente. Ahora, desde que vivo sola, puedo gobernar mi despensa a mi antojo y nunca había estado tan segura de algo, como del hecho de que ser vegetariana es la mejor opción para mi misma.