Marco, no sé por qué te da tanta curiosidad el tema del huevo, jeje, pero te diré que parecido al huevo, nada; si no es en una preparación en la que es fácilmente sustuible o prescindible (en un empanado, en una torta, etc.) no hay nada realmente que sea parecido al huevo... Pero realmente tampoco tiene mucha importancia ni es determinante para dejar de consumirlos, al menos en mi caso