Ya sabes como son las cosas de las madres, que receta exacta nunca dan. Pero nada: corta las patatas como para tortilla, una cebolla en juliana, un par de ajitos en trozos, lo sala. Pocha en un poco de aceita la cebolla con los ajos y cuando están transparentes (¿las retira y las añade luego? esta noche le pregunto) añade más aceite y las patatas, las hace unos 5 minutos o así y después las escurre y mete en una bandeja de horno hasta que se doren con el ajo, la cebolla y una rama de romero. Así es como mejor salen, pero cuando no tenemos encendido el horno, simplemente las freímos.
Después sólo te queda babear y disfrutar.
(Espero explicarme mejor en las clases de esta tarde que ahora, porque vaya tela... )