Por error le di un trago al vaso de leche (de vaca) de mi esposo pensando que era el mio con soja y que asco me ha dado!!!
No había caído en la cuenta de que pudiera saberme tan mal. Es curioso las cosas a las que se puede acostumbrar el paladar pero todavía de acordarme de ese sabor dulcete y grasoso me da náuseas.
Hace algun tiempo no habría siquiera soñado en dejar los lácteos. Me gustaba demasiado el queso y la leche era fundamental para los desayunos. De hecho es lo que mas me costó dejar...Y ahora resulta que por accidente me tomó un trago de leche, de esa misma leche que tanto me gustaba y me causa náusea.
¿A alguno por aquí le ha pasado algo así? Uff, tengo que lavarme la boca, no se me quita el mal sabor.