Ya te han respondido muy bien por ahí, pero añado un par de cosas para hacerlo más gráfico.
Supongamos que yo soy jefa de Estado y hay una crisis y decido inyectar 8 millones de euros en la economía. Le doy a la máquina de hacer dinero y momentáneamente todo va a mejor ¡hay más dinero! Peeeero si yo no retiro ese dinero pronto su valor bajará, porque como hemos dicho antes no es real. Para ser más claros: temporada de uvas si hay buena cosecha (en cantidad) nos salen baratas, pero como haya pocas las pagamos a precio de oro.
El caso es que si los mercados detectan esa irregularidad (hay un montón de dinero inventado) pierden su confianza. ¿Recuerdas lo que comenté del valor fiduciario? Fiduciario viene de
fides que significa fe, confianza o lealtad. Así que los mercados no creen en tu dinero y le dan menos valor. Los tomates que antes te vendían a 2 euros te los venden a 3 porque desconfían. Y eso es lo que llamamos inflación. Es lo que hace que tu abuela diga "hija, en mis tiempos con dos pesetas te comprabas lo que querías"
Uno de los efectos de la inflación es este:
Durante la guerra mundial en Alemania el dinero tuvo tan poco valor que servía para que jugaran los niños. El marco bajó tantiiiiisimo de precio que para comprar el pan había que llevar el dinero ¡en cubos!
El sello más caro pasó de costar 4 marcos a 50 mil millones. Para que te hagas una idea, lo que aparece en esta viñeta es verdad:
El precio llegaba a cambiar dentro del mismo día.
Y eso es por lo que "darle a la máquina de hacer dinero" es tan peligroso.