Iniciado por
veganauta
100% de acuerdo con los dos, y cuanto más conozco e intento ayudar a animales que han sido explotados (y lo pongo en negrita no vaya a ser que de tanto usar el término se nos haya olvidado toda la dimensión del horror por el que pasan todos esos miles de millones de seres sensibles y sintientes, que para la mayoría no cuentan más que en términos de cuantos bebes pueden criar, cuantos litros de leche dan, la cantidad de huevos que ponen o lo rápido que se pueden engordar) durante toda su penosa y terrorífica vida, pues resulta que más relativizo el posible rendimiento práctico de todo ese trabajo de rescate, y más importancia cobra el ir a la raíz del asunto, que no es otra que poner toda la energía de la que seamos capaces en sensibilizar, concienciar y por supuesto en difundir la solución: el veganismo.
Algo muy mal debemos estar haciendo, si no somos capaces de que aquellos que se supone que ya están sensibilizados y concienciados con el problema, como lo son todas esas personas que ayudan voluntariamente a algunos animales, no se decidan a dejar de dar cuerda a la misma maquina que no para de producir animales necesitados de ayuda... ayuda, por cierto, que nunca llegará, ni nunca podrá llegar, para la gran mayoría de ellos.
Por eso, a veces (últimamente más a menudo), se me hace especialmente cuesta arriba, ver como en este foro, incluso entre personas ya veganas, se relativiza el valor del veganismo, llegando a asumir argumentos que en boca de alguien a quien tanto le diera la vida de una vaca, como la del geranio del jardín, como la de los que mueren en guerras lejanas, serían muy "coherentes", pero no en nuestras bocas, no en nuestras manos, no si acaso pensamos que todo lo que hace falta para que la crueldad y la injusticia sigan triunfando, es que nos pongamos a compararlas, y con ello, a relativizarlas.
Estoy convencido, de que para todos a quienes nos importa la compasión y la justicia, sin diferenciar si él que sufre las consecuencias de que sigan brillando por su ausencia, tenga plumas o pelo, camine a dos patas o a cuatro, viva en el agua o en la tierra, lo mínimo, es dejar de ser partícipes directos de la indiferencia y/o la injusticia, lo mínimo a lo que deberíamos aspirar es a, lo que ahora se llama, ser veganos...
...Y pienso, que a partir de ahí que cada uno haga lo que pueda, que ya sólo con el ejemplo de que se puede vivir y disfrutar de la vida, sin desgraciarsela a otros, ya se está ayudando, de manera incalculable, no sólo a que cambie nuestra relación con los habitantes del planeta de otras especies, sino con los de la nuestra propia.