Lo más duro para mi, ha sido y es tener que discutir una y otra vez, con la misma gente, los mismos temas hasta que se les agotan los argumentos (que por otra parte suelen ser limitaditos). Al principio discutía con todos los que soltaban salguna sandez, ahora sólo con aquellos que tienen un punto de vista distinto pero con una mínima base. Con los que empiezan la discusión con un "seguro que comiendo así te falta algo" o "las plantas también sufren y tú te las comes", con esos ya he decidido no malgastar ni tiempo ni energía porque simplemente lo que buscan no es debatir, sino picar a la otra persona. ¿conclusión? con ellos no vale la pena.