Hola, soy un pequeño caniche de color negro azabache con ricitos en el pelo; nací hace 5 mesecitos y me regalaron a un matrimonio de homosexuales que, parece ser, son de los que les gusta ir por la vida ostentando y aparentando lo que no son.
Al principio era muy bonito, tan chiquitín y menudito, y me mimaban mucho, me paseaban con orgullo y me enseñaban a todo el mundo. Pero ha querido mi naturaleza que al crecer me haya convertido en un perrito más bien feo, de gran cabecita y cuerpo delgadito, así que mis amitos ya no me quieren, les avergüenzo y me llaman alien. Yo intento compensar mi fealdad portándome muy bien, soy extremadamente cariñoso y mimosín, muy muy obediente y procuro no molestar quedándome quietecito mientras comen en mi camita pero creo que esto no funciona...
Su casa es muy grande y todo el salón está lleno de alfombras persas. Yo no entiendo mucho de éso y a veces me hago pis, lo que conlleva que me den una paliza de órdago al tiempo que me arrastran por mi pis. Por ello, ya nunca lo hago, tengo mucho miedo y me quedo en un rinconcito esperando a que me saquen pero como soy tan jovencito a veces se me escapa...
Ayer escuché a uno de mis amitos llamar a un familiar para ver si un vecino que tiene una discapacidad psíquica quiere quedarse conmigo pero creo que no y empiezo a asustarme. Mi amito me odia y no sé qué hará conmigo. Me he enterado de que antes de mi tuvieron a otro perrito, de caza, que por su tamaño también les molestó y se deshicieron de él regalándoselo a unos amigos, pero... ¿tendré yo la misma suerte?, ¿encontrarán a alguien que me quiera?, ¿y si no?, ¿qué harán conmigo?....
Por favor, quizá sea mucho pedir pero... ¿te quedarías conmigo? o al menos me acogerías en tu casa mientras apareciese alguien que me quisiera?
Gracias por leer mi carta, quedo a la espera de alguna respuesta.
PD: Vivo en Madrid y no creo que tengan mucho interés en desplazarse para llevarme a ningún sitio pero no sé, albergo la esperanza de que tal vez hablando...