Completamente de acuerdo, Susanamaría, lo de la posguerra sí que era difícil...¡y se independizaban! ¡y tenían hijos! A mí no me gustan los bodorrios, con tanto lujo aparentado y tanto exceso de comida, no creo que me case, y si lo hago, será de manera íntima.
Gracias, Awen, babeoooooooooooooooo. Por cierto, mola tu blog.
un saludín
MUAS
Inés