A menudo calla quién más tiene que hablar, y viceversa.
A la gente vegeta que conozco suele estar más bien callada, mientras que el resto del mundo se siente tan cómodo sin cerrar la puta boca en todo momento... en fin. Lo que tenemos que aguantar, para que encima los radicales y extremistas seamos nosotros.
Sí, la conocemos. Quizá yo más que tú, pero tú has coincidido con ella la última vez que estuvimos en Murcia.