El psyllium es una fibra soluble derivada de las semillas de Plantago ovata, una hierba cultivada principalmente en la India, que se usa frecuentemente como suplemento dietético en forma de gránulos, cápsulas o polvo. Sin embargo, también puede ser un “ingrediente” en productos de panadería.

Gracias a su excelente solubilidad en agua, el psyllium puede ayudar a absorber líquidos y convertirse en un compuesto espeso y viscoso que resiste la digestión en el intestino delgado, lo que le puede permitir ayudar a regular el exceso de colesterol, triglicéridos y niveles de azúcar en sangre. El psyllium también puede ayudar a controlar el peso y a aliviar la diarrea y el estreñimiento.
Beneficios del psyllium.

Alivia el estreñimiento.

El psyllium se puede usar como laxante, ya que aumenta el tamaño de las heces y por lo tanto ayuda a aliviar el estreñimiento. De hecho, el psyllium es capaz de unirse a los alimentos parcialmente digeridos, que pasan del estómago al intestino delgado, ayudando a la absorción de agua y aumentando así el tamaño y la humedad de las heces.

Trata la diarrea.

El psyllium puede ayudar a aliviar la diarrea actuando como absorbente de agua, aumentando el grosor de las heces y ralentizando su paso por el colon.

En resumen, el psyllium puede ayudar a prevenir el estreñimiento y reducir la diarrea, ayudando eficazmente a normalizar las deposiciones.
Reduce los niveles de azúcar en la sangre.

La suplementación dietética con fibra puede ayudar a controlar la respuesta glucémica en las comidas y puede reducir en algunos casos los niveles de insulina y de azúcar en sangre.

Las fibras gelificantes dele psyllium pueden llegar a ralentizar la digestión de los alimentos, regulando mejor los niveles de azúcar en sangre.
Ayuda a perder peso.

Fibras como el psyllium forman compuestos viscosos que pueden ayudar a controlar el apetito y, por lo tanto, ayudar a perder peso.
Reduce los niveles de colesterol.

El psyllium es capaz de unirse a los ácidos grasos y biliares, promoviendo su excreción del cuerpo y, como resultado final, ayudando a disminuir los niveles generales de colesterol y, al mismo tiempo, aumentando los niveles de colesterol HDL (el llamado colesterol “bueno”).
Bueno para el corazón.

Agregar fibras solubles en agua como el psyllium a su dieta puede reducir los triglicéridos en la sangre, la presión arterial y el riesgo de enfermedades cardíacas.
Efectos prebióticos.

Los prebióticos son compuestos no digeridos que nutren las bacterias intestinales y las ayudan a crecer. El psyllium tiene efectos prebióticos, porque aunque el psyllium es de alguna manera resistente a la fermentación, una pequeña porción de la fibra de psyllium todavía puede ser fermentada por las bacterias intestinales, produciendo ácidos grasos de cadena corta, notoriamente ligados a beneficios para la salud.