Los aminoácidos y su importancia para el diabetes
La arginina puede ayudar a reducir la resistencia a la insulina
Los diabéticos no pueden absorber el azúcar necesario de los hidratos de carbono como administrador de energía. La insulina juega un papel crucial. La insulina es una hormona que el propio cuerpo produce y que reduce el azúcar en la sangre. En los diabéticos se restringe la producción de insulina. Además, en el caso de las personas que sufren diabetes, las células del cuerpo no están en situación de absorber la insulina necesaria. Esto se debe a la fuerte sensibilidad de las células hacia la insulina. Las membranas celulares no reconocen esta hormona y por eso absorben poco de ella. De ahí que la llamada “resistencia a la insulina” tiene el siguiente efecto y es que en las células se forma poca energía.
Además, el azúcar en la sangre no se degrada y se acumula, así que el nivel de azúcar en la sangre aumenta. A largo plazo, el hecho de tener de forma permanente unos niveles elevados de azúcar en la sangre produce calcificación y otras enfermedades consecuentes como infartos cerebrales y ataques al corazón. El colectivo más afectado por la diabetes mellitus tipo 2 está compuesto por personas mayores, debido a que, con la edad, disminuye la sensibilidad de las células a la insulina. En un estudio muy publicitado del año 1998 se demostró que la arginina ayuda a disminuir la resistencia a la insulina, lo que a su vez significa que la sensibilidad a la insulina se puede mejorar.1
La arginina, un aminoácido esencial para la toma de insulina
Otro estudio europeo demuestra que el aminoácido arginina es de gran importancia para que las células del cuerpo disminuyan la sensibilidad hacia la insulina. La arginina es el precursor del óxido nítrico, un mensajero químico que influye directamente en la resistencia a la insulina. En el estudio, seis pacientes con diabetes tipo 2 fueron divididos en dos grupos.
Ambos grupos recibieron una típica dieta para pacientes con diabetes. Además, a uno de los grupos se les administró un placebo tres veces al día durante el primer mes. A otro grupo se le suministró durante el mismo periodo dosis adicionales de arginina. Durante la fase de estudio los científicos controlaron regularmente la sensibilidad a la insulina de los pacientes. El resultado fue claro: gracias a la arginina, mejoraron su sensibilidad a la insulina en un 30% más que en el grupo de placebo. La arginina, además, produjo una notable dilatación de los vasos sanguíneos, mejorando claramente la presión arterial de los pacientes.2 Dos estudios realizados en el año 2013 llegan a una conclusión similar.3,4 En otro estudio realizado se demostró que la arginina es también importante para la curación de la enfermedad de pie diabético.5
Carnitina: un suplemento adicional útil en el tratamiento de la diabetes.
Un estudio del año 2007 pudo demostrar que el aminoácido L-carnitina, como suplemento alimenticio en el tratamiento de la diabetes, mejora la sensibilidad a la insulina.6 Pero, además, el consumo de carnitina ofrece una serie de ventajas para los diabéticos. Reduce, por ejemplo, sus niveles del colesterol LDL, tal como quedó demostrado en un estudio del año 2009.7 Asimismo, la carnitina protege a las células del cuerpo contra el estrés oxidativo.
El estrés oxidativo es provocado por los radicales libres, que en algunos procesos metabólicos se producen también debido a la contaminación del medio ambiente, el tabaco o la radiación UV. Los radicales libres pueden dañar las membranas celulares y varias estructuras superficiales de la piel, como las paredes interiores de las arterias. Por este motivo, están con frecuencia involucrados en el origen de enfermedades cardiovasculares. Los diabéticos tienen una mayor probabilidad de padecer enfermedades cardiovasculares, renales y oculares, ya que el aumento de azúcar en la sangre ataca a los vasos sanguíneos. El estrés oxidativo aumenta este efecto. La carnitina, por su contra, consigue disminuir los efectos de los radicales libres y de esta manera proteger el corazón, los riñones y los ojos.8
La carnitina mejora los niveles de grasa
La lipoproteína A es un componente de la grasa en la sangre. Si aumenta la concentración de esta sustancia en el plasma sanguíneo, automáticamente aumenta el riesgo de padecer una enfermedad cardíaca o coronaria. Otro estudio demuestra que la toma de carnitina puede reducir este riesgo. En este caso, el estudio fue efectuado a 94 pacientes con diabetes mellitus Tipo 2, es decir, pacientes con elevado niveles de lípidos en la sangre.
Los citados pacientes se dividieron en dos grupos. Ambos grupos fueron sometidos a una dieta estricta. Los sujetos del grupo de control recibieron adicionalmente un placebo y al otro grupo se le dio un gramo de carnitina al día en forma de tabletas. Tanto tras tres como seis meses de consumo de carnitina se pudo comprobar una significativa disminución de la lipoproteína en el plasma sanguíneo de los voluntarios. Incluso cuando la presente investigación era tan solo un estudio preliminar, demuestra con claridad una clara tendencia de las propiedades de protección de la carnitina.9
el-zinc-regula-la-acumulación-de-insulina
El zinc regula la acumulación de insulina
El zinc desempeña en el ciclo de la insulina un papel importante. Es parte de ésta y es necesario para el almacenamiento y efectividad de la hormona. El zinc también forma parte de muchas e importantes enzimas que intervienen en la regulación y equilibrio de la glucosa implicada en el organismo. Controla, por ejemplo, la liberación de insulina después de la ingesta de alimentos. La ingesta de zinc en España es insuficiente. Está por debajo de la dosis diaria recomendada que es de 12-15 mg al día. Los diabéticos suelen tener más deficiencia de zinc que los no diabéticos, por ello sufren con más frecuencia una disminución de la liberación de insulina.
El zinc estabiliza el azúcar en la sangre
Una dosis regular de zinc durante varias semanas activa en los diabéticos la producción de insulina restante que necesitan y consigue estabilizar los niveles sanguíneos de azúcar. Al mismo tiempo disminuye el azúcar en sangre en ayunas, lo que, en el caso de los diabéticos, se denomina hemoglobina glicosilada (o glucosilada). El zinc también tiene efectos positivos en la cicatrización de heridas. Por lo tanto, la toma es también necesaria en el caso de diabéticos que presenten algún signo de gangrena.
Como parte del tratamiento y prevención de la diabetes es beneficioso tomar diariamente entre 15 y 30 mg de zinc. Una parte debería tomarse en forma de suplemento dietético.10
La luteína y la zeaxantina fortalecen la visión de los diabéticos
La calcificación de las arterias afecta especialmente a la vista en los diabéticos, por lo tanto, la toma adicional de luteína -carotenoide presente en las plantas que actúa como antioxidante- es particularmente de interés. La luteína puede, en la etapa inicial, parar los síntomas de una degeneración macular asociada a la edad, DMAE, especialmente para los que poco a poco van perdiendo su función de la retina. En un estudio de EEUU quedó demostrado. En el marco del mismo se realizó un estudio a 90 pacientes con degeneración macular y se les dividió en tres grupos. Un grupo recibió cada día y durante un año 10 mg de luteína, otro grupo recibió una combinación de luteína con otros antioxidantes, vitaminas y minerales y el grupo de control recibió placebo. Mientras que en el grupo control no se vieron cambios, se comprobó como en el grupo que tomo luteína y el preparado de antioxidantes, vitaminas y minerales aumentó la visión de los participantes en el estudio.
Aunque estos resultados deberían llevarse a cabo en grandes grupos de pacientes y por un tiempo superior, se puede asegurar de todas formas que ha quedado demostrado claramente un efecto positivo de nutrientes antioxidantes para la salud de nuestros ojos11, especialmente de la luteína.
Especialmente para los diabéticos, es importante evitar cargas innecesarias para los ojos y respetar un suministro adecuado de micronutrientes. Esto es especialmente importante para los nutrientes que el cuerpo no puede formar por sí mismo como puede ser los carotenoides luteína y zeaxantina. Ambos protegen los ojos doblemente. Porque funcionan igual que las gafas de sol, poniéndose interiormente ante la retina y filtrando los rayos ultravioletas dañinos para que no afecten a nuestros ojos.
Es de suma importancia impedir que penetren en nuestros ojos radiaciones UV o cualquier otra radiación e impedir el ataque de los radicales libres mediante un mecanismo natural de protección: tomar micronutrientes que impidan el paso de los radicales libres y conseguir neutralizarlos de una forma natural.12 Los diabéticos suelen olvidarse con bastante facilidad de esta doble protección que les permite el filtrado y absorción de los radicales libres. Por eso deben los afectados tener en cuenta el suministro necesario de nutrientes.
Las personas que consumen cada día al menos cinco piezas de frutas y hortalizas toman, por regla general aunque dependiendo de la calidad y la forma de preparación de los mismos- los micronutrientes necesarios. Por lo tanto, los suplementos dietéticos son una alternativa útil. Permiten un suministro regular de todos los micronutrientes necesarios de una forma conveniente. La luteína y la zeaxantina son nutrientes naturales y totalmente inofensivos para la salud. Por desgracia, en la actualidad la producción es relativamente costosa, por lo que el precio de los suplementos dietéticos es alto.
Referencias
1
Krishna Mohan, I. & Das, U.N. (1998) Effect of L-arginine-nitric oxide system on chemical-induced diabetes mellitus, Free Radical Biology and Medicine, Volume 25, issue 7, (pp. 757-765)
2
Piatti, P.M., Monti, L.D., Valsecchi, G., Magni, F., Setola, E., Marchesi, F., Galli-Kienle, M., Pozza, G. & Alberti, K.G.M.M. (2001) Long-term oral L-arginine administration improves peripheral and hepatic insulin sensitivity in type 2 diabetic patients, Diabetes Care, Volume 24, issue 5, (pp. 875-880)
3
Hoang, H. H., Padgham, S. V., & Meininger, C. J. (2013) L-arginine, tetrahydrobiopterin, nitric oxide and diabetes, Current Opinion in Clinical Nutrition & Metabolic Care, Volume 16, issue 1, (pp. 76-82)
4
Rajapakse, N. W., Chong, A. L., Zhang, W. Z., & Kaye, D. M. (2013) Insulin-Mediated Activation of the L-Arginine Nitric Oxide Pathway in Man, and Its Impairment in Diabetes, PloS one, Volume 8, issue 5
5
Arana, V., Paz, Y., González, A., Méndez, V., Méndez, J.D. (2004) Healing of diabetic foot ulcers in L-arginine-treated patients, Biomed Pharmacother, Volume 58, (pp. 588-597)
6
Power, R.A., Hulver, M.W., Zhang, J.Y., Dubois, J., Marchand, R.M., Ilkayeva, O., Muoio, D.M. & Mynatt, R.L. (2007) Carnitine revisted: potential use as adjunctive treatment, Diabetes Diabetologia, Volume 50, issue 4, (pp. 824-832)
7
Malaguarnera, M., Vacante, M., Avitabile, T., Cammalleri, L. & Motta, M. (2009) L-carnitine supplementation reduces oxidized LDL cholesterol in patients with diabetes, American Journal of Clinical Nutrition, Volume 89, issue 1, (pp. 71-76)
8
Löster, H. & Böhm, U. (2000) L-crnitine reduces malondialdehyde concentrations in isolated hearts in dependence on perfusion conditions, Molecular and Cellular Biochemistry, issue 217, (pp. 83-90)
9
Derosa, G., Cicero, F.G., Gaddi, A., Mugellini, A. Ciccarelli, L. & Fogari, R. (2003) The effect of L-carnitine on plasma lipoprotein(a) levels in hyperchol esterolemic patients with type 2 diabetes mellitus, Clinical Therapeutics, Volume 25, issue 5, (pp. 1429-1439)
10
Niewoehner, C.B., Allen, J.I., Boosalis, M., Levine, A.S. & Morley, J.E. (1986) Role of zinc supplementation in type II diabetes mellitus, American Journal of Medicine, Volume 81, issue 1, (pp. 63-68)
11
Richer, S., Stiles, W., Statkute, L., Pulido, J., Fraukowski, J., Rudy, D., Pei, K., Tsipursky, M. & Nyland, J. (2004) Double-masked, placebo-controlled, randomized trial of lutein and antioxidant supplementation in the intervention of atrophic age-related macular degeneration: the Veterans LAST study (Lutein Antioxidant Supplementation Trial), Optometry Journal of the American Optometrid Association, Volume 75, issue 4, (pp. 216-229)
12
Semba, R.D. & Dagnelie, G. (2003) Are lutein and zeaxanthin conditionally essential nutrients for eye health?, Medical Hypotheses, Volume 61, issue 4, (pp. 465-472)