Aquí el sentido que se da a la locura sólo considera la estimación mayoritaria independientemente de si hay más o menos razón en ello. Sigo viendo que somos los vegetarianos los locos hasta que bebiésemos de su misma fuente. Imposible... tendrán que ser ellos los que beban de nuestra fuente!
Es porque el cuento ha querido sólo prestar atención a lo voluble del término locura dependiendo de quien opine (si los locos de un lado o los del otro), que no ha puesto interés en quien tenga que beber. Alguien nos observa y se ríe de nosotros... jeje.
¡Un saludo Florbela!