Bienvenida Angeline!
Me parece fenomenal que tu familia te respete tanto, no es muy fácil conseguir eso y a mi es lo que más me ha costado!
Ahora ya intentan adecuar un poco los menús para que yo también pueda comer, de todos modos siempre tengo algo congelado por si en algun momento necesito echar mano a ello.
Lo del pescado, creo que es normal. Personalmente me costó bastante más dejarlo que la carne pero lo que hagas hazco pausadamente y cada paso que avances que sea seguro. Mas vale tardar 5 meses pero estar segura que no 2 semanas y no tener los menus planificados y demás.
un beso y encantada de leerte!
Solo cuando el alumno está preparado aparece el maestro.
Pues sí, he tenido suerte con mi familia: marido, padres y hermanos. Mi marido desde el primer momento tuvo claro que era mi decisión y era él el que me decía que si yo no quería comer carne no tenía por qué comerla, ni en reuniones familiares ni en ningún sitio. Mis padres (bastante mayores) y mi hermana se sorprendieron bastante, pero nunca me han criticado. Cada vez que voy a casa de mi hermana y ha preparado carne para los demás a mí me ha preparado pescado. Pobrecita, no sé lo que hará cuando me decida a dejarlo también. Bueno, haré como cuando voy a casa de mis padres. Me voy con mi hamburguesa de tofu o de seitán a cuestas y problema solucionado. A mi madre, que tiene casi 80 años no es cuestión de darle más trabajo...Bastante tiene con haberle salido una hija rara...Ja, ja, ja.
Y opino como tú. Hay que hacer las cosas poco a poco. Ahora ya casi he perdido el miedo a equivocarme con las proteínas, el hierro y todo lo demás. Intento comer lo mejor posible y punto. Dentro de poco le tocará el turno al pescado. A ver qué pasará...Hasta pronto. Angeline.