TomaLaTierra: Veganismo como cuestión política

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Toma la Tierra, colectivo y programa de radio para la difusión de las luchas en defensa de la tierra. Porque si la revolución no es ecologista no habrá donde hacerla.
Les dejo el enlace del último programa pues una de sus secciones la ocupa la charla El veganismo como cuestión política que se dió en el 1er VegFest de Málaga organizado por el colectivo CLAMA (Colectivo por la Liberación Animal de Málaga) así como otra superrequeteinteresante programación:

Crónica del encuentro Klimacamp-Reclaim the Fields
Dificultades y avances contra la incineración
Veganismo como lucha política
Galicia arde intencionadamente
y rap germinal.

http://tomalatierra.org/octubre-24o-...ionadamente-y/

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Veganismo y política
Artículo de REDACCIÓN del 25 de marzo 2015 a Voces del territorio · 0 Comentarios

El veganismo es una actitud de respeto hacia todos los animales, rechazando las prácticas y el consumo de productos obtenidos a través del uso o de la muerte de animales. Ya sean productos para comer, vestirse etc. Cada vez somos más veganos, pero creo que hay un concepto básico que no se contempla en el veganismo mayoritario actualmente. Parece que ser vegano sea sólo seguir una dieta, y para algunos, también estimar los animales; Pero ni es una dieta, ni los animales necesitan que los ames, necesitan que los respetes. El respeto es previo a la estima.

El veganismo conlleva un activismo, el veganismo será revolucionario o no será nada. Veganismo es anticapitalismo. Ya que etiquetarse vegano es tan fácil como abrir la boca para hablar. El tema es que el veganismo, si no posee una matriz política, se convierte en simplemente otro producto más a consumir dentro de esta sociedad capitalista, otra cosa ante la que mirar, observar y simplemente ser partes de una inacción que rodea los tiempos en que vivimos, donde si algo se pone de moda es por su novedad, no por su ética.

Pero vayamos por partes. La asunción de la superioridad del hombre sobre los animales viene de lejos, y ha generado una ignorada pérdida del saber. La pérdida del saber tiene que ver con el olvido de lo que dijo Charles Darwin sobre el hecho de que el ser humano es un animal más, fruto de la evolución de otras especies que ya se han extinguido.

Los humanos no somos la única especie del planeta, compartimos el planeta con millones de otras criaturas, y evolucionamos todos juntos. Pero son los humanos quienes tratan de dominar la tierra, a menudo tratando a otros seres como simples objetos. Esto es lo que el psicólogo Richard D. Ryder llamó "especismo" y lo que el filósofo Peter Singer popularizó en su libro "Animal Liberation". Por analogía con el sexismo o el racismo, el especismo es un prejuicio o actitud favorable hacia los intereses de los miembros de la propia especie y contra los miembros de otras especies. Estaríamos hablando de un antropocentrismo moral. Pero si un ser sufre maltrato, dolor, aislamiento, etc. no hay ninguna justificación moral para no tenerlo en cuenta.

Entre los miembros del grupo humano reconocemos el imperativo moral del respeto, cada humano es alguien, no algo. El trato irrespetuoso acontece cuando los que poseen el poder tratan a los menos poderosos como si fueran objetos; el violador hace esto con la víctima de la violación, el pederasta con el niño, el esclavista con el esclavo, en todos estos casos los humanos con poder explotan al que le falta. Quizás lo mismo es cierto en como tratamos otros animales, otros habitantes de la tierra. Sin lugar a dudas hay deferencias, dado que los animales humanos y los no-humanos no son iguales en todos los aspectos, pero la cuestión de igualdad tiene otro sentido. Es seguro que estos animales no tienen los deseos que tenemos los humanos, seguro que no comprenden todo lo que comprendemos nosotros, sin embargo, nosotros y ellos compartimos algunos deseos y comprendemos algunas de las mismas cosas, por ejemplo, el deseo de comer y beber , de libertad de movimiento, de compañía, y de evitación del dolor. Estos deseos son compartidos por animales humanos y no-humanos. Y en cuanto a la comprensión, todos los animales comprenden el mundo en el que viven y se mueven, de otro modo no podrían sobrevivir. Así que detrás de las diferencias, también hay igualdades, sin caer en el antropomorfismo. Como nosotros, encarnan la maravilla de la conciencia y de estar en el mundo, y como nosotros, son el centro psicológico de sus vidas, que son únicamente suyas. Lo que les hacemos a los animales, o cómo debemos tratarlos, son preguntas que las respuestas comienzan en el reconocimiento de nuestro parentesco psicológico con ellos. En cambio, parece que nos hemos convertido en una especie de aristocracia biológica.

Tal y como escribió el premio Nobel Isaac Bashevis Singer en su libro "Enemigos, una historia de amor": Cuando Herman era testigo de la matanza de animales y peces, siempre tenía el mismo pensamiento: en su comportamiento hacia los animales, todos los hombres son nazis. La vanidad con que el hombre hace su voluntad con los animales es un vivo ejemplo de las teorías racistas más radicales, el principio de que tener el poder, es tener la razón.

Nuestra especie, al igual que nuestra raza, sexo etc., no es más que un grupo de clasificación que de ninguna manera determina el peso que merecen nuestros intereses.

Por todo ello, y siguiendo la premisa de que el veganismo es anticapitalismo, creo es un buen momento para reflexionar, e incluir el tema de los derechos de los animales en el discurso de la izquierda independentista.

La izquierda independentista lucha para dar voz a las necesidades y los intereses de las clases populares, para dar voz a quienes se les niega, por la justicia social, por todas las justicias. Por eso creo que incluir la lucha de los derechos de los animales es un acto de coherencia, es una lucha como las otras, es dar voz a quien no la tiene. En el capitalismo, los seres vivos quedan reducidos a recursos y productos. Esto le pasa a los humanos, los animales y los ecosistemas por igual. Una crítica basada únicamente en una de las dimensiones de este complejo sistema esquiva el problema.

Debemos hacer frente al condicionamiento al que nos vimos sometidos durante nuestra infancia y que se repite a lo largo de nuestra vida adulta, en la que continuamente se proyecta la idea de que los intereses de los animales no son relevantes y los podemos utilizar para nuestro beneficio.

[Parte de este artículo está inspirado en el documental Earthlings , que se puede encontrar libremente en la red.]

Toni Ventura

http://xarxapenedes.cat/veganisme-i-politica/