Mi marido está de guardia siempre, 24 horas, 365 días al año. El resultado es que le llaman a horas intempestivas, así que tiene el ciclo del sueño absolutamente alterado. Es un horror.
La verdad es que no me molesta: el rato de dormir lo tengo asumido. Lo de que me despierten a las cuatro y media a veces lo llevo peor, porque como no para de maullar hasta que me levanto... Pero es que tiene hambre, pobrecito, no le voy a dejar sin comer...
Ah, no sabe en qué consisten y tampoco sabe identificar los síntomas, cosa que es natural.