La conductora resulta herida de gravedad y el incidente causa retenciones a lo largo del jueves
Un camión cargado de terneros vuelca en la C-15 en Capellades
SOCIEDAD VIERNES, 15 DE AGOSTO 2014. 03.00H
Un camión cargado de terneros volcó al margen de la carretera C-15 en Capellades miércoles por la noche, en un aparatoso accidente que causó retenciones hasta el jueves por la noche. En el vehículo de gran tonelaje viajaban 90 animales, 42 murieron y el resto esparcieron por el bosque y el alrededor del río Anoia. Además, la conductora resultó herida de gravedad y fue trasladada al Hospital de Bellvitge.
Así ha quedado el camión tras caer descalabro del puente de la C-15 en Capellades. Foto:xipnoti
Así ha quedado el camión tras caer descalabro del puente de la C-15 en Capellades. Foto:xipnoti
Los agentes rurales y los Bomberos han reagrupado una cincuentena de terneros esparcidos por los bosques y el río Anoia después del accidente. Foto:xipnoti
Los agentes rurales y los Bomberos han reagrupado una cincuentena de terneros esparcidos por los bosques y el río Anoia después del accidente. Foto:xipnoti
Algunos de los animales dispersos. Foto:xipnoti
Algunos de los animales dispersos. Foto:xipnoti
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etiqueta terneros , accidente , camión , capellades
La mujer que conducía el camión, herida de gravedad, fue trasladada en una ambulancia del Servicio de Emergencias Médicas (SEM) al Hospital de Bellvitge. El acompañante de la conductora también resultó herido leve. Los Bomberos de la Generalitat recibieron el aviso del accidente a las 23:24 horas. En el accidente trabajaron nueve dotaciones de los Bomberos, entre ellos dos veterinarios del parque de Bomberos de Matadepera que sacrificaron los terneros malheridos. Los animales muertos fueron retirados el jueves por la mañana y la empresa propietaria se ha hecho cargo de los animales que han sobrevivido. El vehículo se quedó hasta el jueves por la noche en el lugar del accidente a la espera de que una grúa de grandes dimensiones pudiera efectuar las tareas de evacuación. Debido a esto se tuvo que cortar un carril de la C-15 y desviar los coches por el casco antiguo de Capellades, lo que causó retenciones hasta pasadas las nueve de la noche.