Resultados 1 al 2 de 2

Tema: Se llama ternera

  1. #1
    Usuari@ habitual Avatar de Bianca_Love
    Fecha de ingreso
    abril-2008
    Mensajes
    98

    Se llama ternera


    Este es un relato que escribí hace algún tiempo:

    La tarde se estaba poniendo nublada, iba en mi coche con Alicia, mi compañera de supermercado, nos dirigimos a la escuela de primaria, siempre recogemos a mi hermanita a la salida del cole. Se llama Mirella y es una niña muy inteligente, este año quizá pase dos cursos de golpe. Trabajo desde hace un par de meses en la sección de carne del supermercado, hoy llevo todo el uniforme perdido.

    Mirella se sonríe como siempre cuando me ve aparecer y corre hacia el coche, cuando se monta grita:

    - ¡Qué asco, huele a muerto!- No se de dónde sacará esas cosas, ahora le ha dado por defender los derechos de los animales, y desde hace cuatro meses no come carne, no sé ya como explicarle que pertenecemos a una cadena alimenticia y que...

    Creo que hemos tenido un choque, no puedo moverme, gracias a Dios Mirella está bien, está fuera del coche llorando como loca, está asustada, sólo tiene nueve años. Alicia la abraza mientras coge el móvil, supongo que para avisar del accidente. Intento moverme para salir a tranquilizarlas pero me pasa algo que no alcanzo a explicar, creo que el choque ha sido más fuerte de lo que pensaba, me desvanezco...

    He perdido la conciencia por un largo rato. Me despierto y me encuentro rodeada de animales, ¡que asco!

    Noto como algo viscoso me recorre la nuca. Umh, me gusta, -ah, ya; ¡es mi mamá! Creo que estoy soñando, mi mamá tiene cuatro patas y manchas negras y blancas, -¿pero qué digo? Definitivamente, creo que estoy drogada. Me vuelvo a desvanecer...

    Me vuelvo a despertar y siento que el día del accidente queda muy lejos, incluso me planteo que no haya pasado nunca. Mi mamá me quiere mucho, me sigue lamiendo, parece que no ha pasado mucho rato, y me acurruca en su pecho. ¡Me siento tan bien! Quiero que este momento dure para siempre. Te quiero mamá.

    De nuevo duermo y recupero la concienca, y me doy cuenta de que es de noche desde que estoy aquí, ¿es que aquí nunca sale el sol? Lloro porque quiero salir a jugar, quiero salir con mi mamá, estoy cansado de estar en este lugar.

    De repente se abre una gran puerta metálica y yo salto de felicidad, ¡nos van a sacar fuera! Entran unos hombres muy serios, la verdad es que me dan miedo, pero bueno, me siento feliz porque quiero salir y ver el sol, ¡voy a jugar fuera por primera vez!

    ¿Pero que están haciendo? A los demás los están separando de sus mamás, les están pegando con un hierro al que se le enciendo una luz azul cuando los toca y están llorando, ¿por qué les hacen daño? No han hecho nada. Ahora siento mucho miedo, vienen hacia mí, no quiero que me separen de mi mamá, no quiero que me hagan daño, a mi mamá se le ponen los ojos húmedos mientras me hace señas para que esté tranquilo. ¿Pero cómo voy a estarlo? ¡No, no quiero ir mamá! Me mira con un dolor en la mirada que nunca había visto antes, parece que no es la primera vez que pasa por esto. ¡Por favor, no dejes que me lleven, no quiero ir!

    No se a dónde nos llevan, el palo de la luz azul es muy doloroso, no entiendo nada, ahora me siento débil y casi no puedo andar, pero tengo que resistir, a los que les flaquean las piernas le dan patadas muy fuertes para que sigan caminando.

    No, no puedo más, me duele mucho el costado, ahora siento terror por el palo azul. Se me derrumba la patita delantera derecha, no tengo fuerzas, y cuando me ven me propinan un puntapié justo en el estómago que me hace perder el control de mis esfínteres. El hombre grita riéndose:

    -No te cagues, vas a ser una ternerita para chuparse los dedos, ¡venga, muévete!

    No se que significa "ternera", solo se lo había escuchado a la hija de uno de esos hombres, una niña casi tan pequeña como yo se acercó a mí, me tocoó la cabeza y dijo:

    -Oh, que ternerito tan lindo.

    Supongo que soy un ternerito, espero que eso sea algo bueno, quizá a donde nos llevan haya muchos niños llamándonos lindos y acariciándonos, esa idea no me disgusta, pero quiero volver con mi mamá.

    El suelo es metálico y está frío, no se que hacemos aquí, estamos muy lejos de la puerta que da a la calle.

    A uno de mis compañeros lo cogen entre dos hombres por el cuello, ¿pero qué hacen esos desgraciados? ¡Le estáis haciendo daño!, ¡parad, por favor! Sacan algo metálico grande y afilado y lo sujetan fuerte mientras intenta escapar, pero no puede, ¡son dos hombres grandes contra él!, ¡es el más pequeño! Ahora lo cuelgan de las patitas traseras boca abajo de un cordón en el techo, el hombre aún sostiene el metal afilado en la mano y de repente le hace un corte tan profundo en la yugular que hace que la cabeza se separe varios centímetros de su pequeño cuerpo, nunca había visto tanta sangre junta, todos lloramos e intentamos escapar de allí pero no podemos, ellos son muy grandes con respecto a nosotros, sigue desangrándose y gritando mientras se ahoga en su propia sangre, ¡quiero irme de aquí! ¡Nunca he sentido tanto miedo, quiero irme!

    El siguiente soy yo, me cogen de las patitas y me cuelgan boca abajo, y lo último que veo es el cuchillo acercarse mi cuello.

    No sabía que se pudiera sentir tanto dolor, ¡por favor, ayudadme, quiero morir de una vez! Ha pasado más de media hora y ya estamos todos en la misma situación, aún gritamos casi todos, aunque no puedo abrir los ojos, pues creo que he perdido la visibilidad y la movilidad de mi boca y lengua, puedo sentir que los demás también siguen vivos, y que están sufriendo tanto o más que yo.

    ¡Tan solo pido que me maten de una vez! ¡Acabad de una puta vez conmigo, cabrones! ¡No puedo más! ¿Pero qué hemos hecho? De repente viene a mi memoria mi hermanita Mirella y el accidente de coche. Pierdo la conciencia definitivamente, y por fin dejo de sentir dolor. Descanso.

    Despierto en una camilla de hospital, mi hermanita me mira junto a mis padres y cuando se percata de que he abierto los ojos grita ¡se ha despertado, se ha despertado! Me fundo en un interminable abrazo con ella y sólo alcanzo a decirle con un tenue hilo de voz:

    -Jamás volverás a soportar ese terrible olor a cadáver, por lo menos no en tu hermana. Te quiero mi niña-

  2. #2
    Comeflores Avatar de Melodie
    Fecha de ingreso
    febrero-2014
    Ubicación
    En mi cuerpo
    Mensajes
    1.274

    Por desgracia no pueden hablar y por desgracia nosotros muchas veces no queremos entender ni ver lo que quizá quisieran decirnos si pudieran.
    Tu relato me ha puesto triste :-(

Temas similares

  1. ¡Rescate de una vaca y su ternera!
    Por El Hogar ProVegan en el foro Mundo Animal
    Respuestas: 10
    Último mensaje: 10-dic-2014, 13:46
  2. El que no es vegetariano se llama...?
    Por La Madre del Topo en el foro Miscelánea
    Respuestas: 18
    Último mensaje: 11-ago-2012, 22:09
  3. Proteínas de ternera imprescindibles, según mi médica
    Por monics en el foro ¡Ya soy vegetarian@!
    Respuestas: 35
    Último mensaje: 07-abr-2012, 13:18
  4. Lonchas de ternera vegetal
    Por Raquel1983 en el foro Cocina Vegetariana
    Respuestas: 10
    Último mensaje: 24-nov-2009, 14:02
  5. ¿Qué le ponemos a su coche, ternera o cerdo?
    Por marygood en el foro Medio Ambiente y Salud Pública
    Respuestas: 10
    Último mensaje: 20-abr-2007, 10:20

Etiquetas para este tema

Permisos de publicación

  • No puedes crear nuevos temas
  • No puedes responder temas
  • No puedes subir archivos adjuntos
  • No puedes editar tus mensajes
  •