Ha sido horroroso, qué impotencia y qué sociedad enferma . Han pasado por encima de las 50.000 personas que salimos a la calle, por encima de los miles de firmas recogidas por la gente que ha ido allí a defender a un inocente indefenso y lo que es peor, han sacado a las fuerzas de orden que pagamos todos para defender a los asesinos.
Qué tristeza y qué gran vergüenza.