Y otra cosa que se hacía en mi casa era dejarles comida y bebida a los reyes y a los camellos, porque según mi madre estarían hambrientos de tanto viaje y trabajo. Así que al levantarnos lo primero que se hacía era comprobar si habían llegado ya, mirando si se la habían comido. Dejaban migas en el plato y todo, se ve que mis padres cuidaban los detalles, jeje. Y bueno, despues ibamos corriendo hacia el arbol, claro.