Juaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa. .. ¿Pero qué has desayunado hoy?
Buenas,
ayer estaba acostando a los niños, me acerco a la ventana para abrirla y veo que el vecino está tumbado en el sofá, con las cortinas abiertas. Me fijo más, y está con el mando en la mano. No con el mando de la tele, si no con ese mando que tenemos los varones que toma el mando de nuestras acciones en un porcentaje elevado de ocasiones. Que no veo mal el onanismo eventual, pero oye, cierra las cortinas para darle a la zambomba, que no estamos en nochebuena ni eres Papa Noel. 25 de julio, zum, zum, zum, que me asoma el cipote, que lo tengo como un garrote, zum, zum, zum.
Esto me recuerda a un compañero de trabajo, que me contaba un día que le habían llamado del cole por que su hijo estaba muy revoltoso. El chaval tiene un tipo de autismo. Total, que llega el señor al cole y le dice el psicólogo del cole que el chaval está como una moto y que no hay quien se haga con él. Siguen hablando y le dice "Mire, a las claras. Lo que tiene usted que hacer es enseñarle a hacerse pajas para que se relaje". Muahahahaha, más que un psicólogo es un pichólogo. Nos contaba este señor que se quedó muerto, si no le hubiera preguntado si tenía que enseñarle lo básico o hacerse una con la mano muerta, con las uñas pintadas, con nivea, el náufrago, la manoletina y la madre que le parió. Nunca supe si le llegó a enseñar (ni me quiero saberlo), pero me imagino a mi padre enseñándome a darle al manubrio y quiero morir. Y eso que nunca sucedió.
Esto me recuerda de nuevo a un antiguo compañero, este del colegio. Dedicado al mundo de la farándula, alcanzó cierta fama por sus excentricidades. Total, que cuando regentaba un bar/museo/sala de exposiciones/lugar de chascarrillos con cervezas/ etc me contó que había hecho en el patio de su casa un santuario de animales. Entre ellos, un cerdito vietnamita (utilizo el diminutivo para evitar hablar de Charlies y el Vietnam) que un día se comió unas bolas de gel que en contacto con líquido se llenan de agua y crecen bastante de tamaño. Estaba el marranico con problemas de tránsito intestinal, concretamente con un marrón que no podía gestionar, cuando se le ocurrio al colega una genial idea. Dada su maña en ciertas artes amatorias, y armado con paciencia y un bote de lubricante, le fue sacando las bolicas de gel del ojal. Para gran alivio del cerdito. Pero el alivio no era completo, dado que en estas el marranico se puso como un berraco de tanto manoseo por la puerta de atrás. Con el cipote como un garrote, y sin marrana receptiva donde aliviarse, nuestro héroe tanto le vio sufrir, que un alivio manual le proporciono. Y del roce nace el cariño. Así que el marranico se enamoró, nada platónicamente, del humano. Pero era rechazado (amor de una noche, queridos, así son los hombres), así que en una velada con amigos, el cerdito se le agarró a la pierna como un perrico en celo y explotó. Explotó con tal maña y cantidad, que una nevada cayó en la sala, salpicando a todos y cada uno de los comensales. Nunca se asistió a semejante bukkake.
Besitos.
Juaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa. .. ¿Pero qué has desayunado hoy?
jajajaja, te has hecho esperar, cabroncete
We do not inherit the Earth from our ancestors: we borrow it from our children.
El optimismo de la acción es preferible al pesimismo del pensamiento. Proverbio Cree.
Jajajajajaj. Bestial.
Cuando has dicho lo del diminutivo de cerdito vietnamita pensaba que hablabas de "vietnamita", diminutivo de ¿vietnama? No comprendía. Me recuerda a los drogaditos que tanto me intrigaban de pequeño, tratándoles con cariño con lo malos que eran.
Vuelve más veces.
Don Tito Chinchan
Se le echaba de menos.
La única posibilidad de descubrir los límites de lo posible es aventurarse un poco más allá de ellos, hacia lo imposible.
We do not inherit the Earth from our ancestors: we borrow it from our children.
El optimismo de la acción es preferible al pesimismo del pensamiento. Proverbio Cree.
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Blog de cocina vegana