Iniciado por
Spinoza88
Me planteé el problema desde el ejemplo de los cupos a estudiantes afroamericanos en las universidades de EEUU. Seguro que muchos lo habéis visto en las pelis o en algún documental, allí hay bastante gente que se queja de que sus hijos (blancos) no puedan acceder a la universidad que desean cuando hay estudiantes negros con peores notas que sí que pueden porque entran "enchufados" por el estado.
A priori, tomado esto tal y como suena y sin análisis, que es como suele fundarse la opinión popular, parece que es discriminatorio e injusto para esos chavales. Pero si pasamos a analizar la situación desde la raíz y no nos quedamos en la superfície, yo creo que es evidente que el chaval de raza blanca y de clase media no parte en las mismas condiciones (culturales, económicas, psicológicas incluso...) que la mayoría de chicos afroamericanos, lo que le hace conseguir mejores notas y tener, en general, más oportunidades para medrar socialmente. Hay que pensar que estamos hablando de siglos de discriminación, en los que por ser negro no podías ni entrar a la biblioteca, nulo acceso a la cultura y a la educación, condiciones económicas precarias... pese a que eso nos suene a un tiempo lejano, los efectos todavía permanecen en ese grupo social en EEUU, y un chaval afroamericano ya desde la cuna nace con un hándicap cultural importante, entre otros. Por lo tanto, el esfuerzo que tienen que hacer los dos chavales de grupos sociales distintos para sacar la misma nota no es el mismo. El afroamericano, salvo condicionantes genéticos o golpes de suerte, tiene necesariamente que esforzarse mucho más que el otro, que lo tiene absolutamente todo más fácil (ambiente familiar, capacidad económica, herencia cultural, etc.) y eso por no hablar del ambiente social entre uno y otro grupo, que todavía añaden más hándicaps aún a la vida de los niños afroamericanos. En definitiva, que me enrollo, es justo que el estado ayude mediante estos cupos reservados a los afroamericanos a que esta brecha en las condiciones de vida de uno y otro grupo desaparezca, y entonces sí se pueda hablar de construir una sociedad justa dónde cada uno avance según sus méritos, que en teoría es la clase de sociedad que propugna el capitalismo, una meritocracia.