uffff, yo esto si que lo encuentro una muestra de intolerancia e ignorancia. Habría que ver que pasaría si alguien escribiera algo parecido en contra de los veganos, insultando de esta manera. Parte por parte.

Lo , es inconcebible que te metas con Santo Tomás de Aquino porque creía en la generación espontánea. Eso es ignorancia, heredada de su tiempo, no estupidez. ESTUPIDEZ es llamarlo imbécil por no saber algo que no se descubriría hasta siglos después; por esa regla de tres, Aristóteles ha sido uno de los grandes imbéciles de la historia de la Humanidad (anda que no se equivocó en cosas...). De hecho, la profundidad filosófica de Santo Tomás lo convierte casi con total seguridad en el hombre más INTELIGENTE de su tiempo, con el innegable lastre de la ignorancia en la que vivió. Es más, si viviera ahora, seguramente se hubiera dedicado a la ciencia y probablemente tendría un Nobel o hubiera aspirado a alguno. Hombres tan inteligentes ha habido MUY pocos en la historia, aunque millones con mejor formación.

Lo , esto es que es de risa, este hombre escribe un artículo serio argumentando que Dios no existe!!! (¡¡¡¡¡!!!!!) JAJAJA JAJAJA JAJAJA menuda seriedad, pruebas contra la existencia de Dios = 0, exactamente las mismas que afirman que Dios existe

, la Teoría de la Evolución de Darwin, con todas sus imperfecciones ahora conocidas, puede considerarse tranquilamente el mayor logro científico de la Historia (Ley de la Gravedad, Teoría de la Relatividad...), nunca se dedujo tanto con tan poco. De hecho, es prácticamente perfecta, y la SELECCIÓN NATURAL no es que explique la evolución, es que es la esencia de la vida misma. El más apto (que no el más fuerte) sobrevive, es de cajón; la empresa más eficiente, se queda con el mercado; el opositor más cualificado, se queda con el puesto de trabajo; el pez grande se come al chico... Menudo acierto lo de la selección natural. La vida es pura competencia en sí misma, no tiene sentido sin ella: competencia por sobrevivir, se reduce a eso, ya hablemos de célula, individuo, población o ecosistema. De hecho, aunque esto puede discutirse en otra ocasión, los veganos compiten por elevarse en la escala moral sobre los que comen carne o toleran el maltrato a los animales, se puede reducir a ello:
En este mes de junio del año 2005, desde esta altísima columna de moral de la revista SoHo que he levantado sobre viejas en pelota, propongo cambiarla por la compasión
Y , no entiendo la argumentación de que el hombre es una especie más, una especie entre millones. Directamente, no tiene sentido alguno. En todo caso, el hombre es una especie sobre millones, no por nada ha escalado hasta el tope de la escala evolutiva y es la especie reinante.
El hombre es consciente de su propia existencia, ese es el punto crucial. Nada diferencia tanto al hombre del resto de seres que la naturaleza filosófica de su pensamiento. Los animales, sometidos por el hombre, sufren, no es culpa suya. Pero tampoco es culpa del hombre. Los animales sienten, sufren; pero no son más que una máquina biológica con el objeto de autoperpetuarse. El hombre sabe que es el dolor, lo percibe, es consciente de él. Y puede razonar, comunicarse, aportar algo a la sociedad y mejorar la experiencia de la especie. No así los animales, no de forma activa. Su papel para con el hombre, en la vida movida por la competencia, es el de servirlo y alimentarlo, no cabe otro nicho ecológico posible. Es algo contra natura. No es natural autoproclamarse salvador del mundo; de hecho, es extremadamente arrogante. La capacidad de sentir dolor sólo es un hallazgo evolutivo (gracias selección natural ) para ayudar a la supervivencia de la especie, pero el hombre ha sido capaz de comprender esto: lo hace diferente e infinitamente superior a los animales.