Claro, pero una cosa es lo que pactes ANTES. El problema es si te vuelves vegeta cuando el niño ya ha nacido, ya come, y ya tiene otras costumbres. ¿Qué haces entonces? Ahí está la cuestión, que si le das al niño un filete de pollo que le encanta y al mes siguiente le dices que eso no se come... sería muy confuso, la verdad.